Madrid, 7 oct (PL) España ratificó hoy sus derechos sobre las aguas adyacentes a Gibraltar y rechazó una protesta reciente del Reino Unido sobre la presunta violación territorial por un barco hispano.
Sobre la actividad del buque oceanográfico Ángeles Alvariño una nota oficial aclaró que estaba llevando a cabo una misión de investigación medioambiental en el entorno de una Zona de Especial Conservación reconocida como tal por la Unión Europea.
España -agrega- no reconoce al Reino Unido otros derechos relativos a los espacios marítimos de Gibraltar fuera de los comprendidos en el artículo X del Tratado de Utrecht y las aguas adyacentes son, por tanto, españolas.
Mediante el tratado de Ultrech, firmado al finalizar la Guerra de Sucesión española, en 1713, el Rey Felipe V cedió a perpetuidad a los británicos el Peñón de Gibraltar, enclave de 6,8 kilómetros cuadrados y 31 mil habitantes.
A diferencia del Reino Unido, España considera que el tratado de Ultrech cedió el peñón, pero no las aguas que lo rodean.
El gobierno español puntualizó en su nota que, por tanto, lo que el Reino Unido califica como incursiones ilegales en aguas territoriales británicas son actividades rutinarias de buques españoles en aguas propias.
España, subraya la declaración, no tiene duda alguna de los límites de su territorio y por tanto sus buques seguirán ejerciendo los cometidos encomendados en esas aguas de la misma forma que lo hacen desde tiempo inmemorial.
La nota oficial indicó que el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Gonzalo de Benito, comunicó ayer la tradicional posición española sobre el tema al ministro de Estado para Europa del gobierno británico, David Lidington.
España ratifica autoridad sobre aguas adyacentes a Gibraltar
