México, 1 nov (PL) El diálogo entre las autoridades y los estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) sigue hoy estancado, mientras los docentes mantienen el paro y anuncian su adhesión a las protestas por el caso Iguala.
Los estudiantes del IPN anunciaron que se unirán a otra Jornada Global por Ayotzinapa, en reclamo por la suerte de 43 estudiantes normalistas de esa localidad del municipio guerrerense de Iguala, desaparecidos el 26 de septiembre pasado.
Para el próximo 5 de noviembre está pactada la nueva jornada de protesta, con un paro nacional educativo al que se convocó a escuelas y universidades de todo el país, así como una marcha desde la residencia presidencial de Los Pinos hasta el Zócalo, en el centro histórico de esta capital.
La víspera, los docentes del IPN desfilaron hasta la sede de la Secretaría de Gobernación, donde realizaron un mitin en el que dieron a conocer un comunicado según el cual sostuvieron que pondrán de rodillas al Estado y no se doblegarán ante presiones oficiales.
El texto asegura que el caso Iguala demuestra que la violencia es consecuencia de un sistema económico y político desigual e injusto que beneficia a las minorías ricas.
Representa, añade, una política sostenida desde el Estado para concretar el arrebato de los derechos sociales y el despojo de los recursos naturales del país.
El movimiento estudiantil politécnico ha ido radicalizando sus demandas, que iniciaron con exigencias contra un nuevo reglamento y cambios en los planes de estudio que las autoridades detuvieron y ofrecieron negociar con los docentes en paro desde hace varias semanas.
Los sucesos violentos en Iguala y la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa dieron un vuelvo a la protesta del IPN, que ahora reclama la unión de todos los estudiantes mexicanos y otros sectores sociales contra la violencia y la impunidad.