Juzgarán de nuevo en Francia caso de sobredosis de radiaciones

París, 12 nov (PL) El caso de unos 450 pacientes con cáncer que fueron sometidos a dosis excesivas de radiaciones en un hospital francés será llevado de nuevo a juicio a partir de hoy en la Corte de Apelaciones de París.
Entre 2001 y 2005 las víctimas recibieron un tratamiento inadecuado en el nosocomio de la comuna de Epinal, del nororiental departamento de Los Vosgos, debido a la mala calibración de un aparato y la falta de controles adecuados.
Doce de los afectados fallecieron ya y el resto sufren graves secuelas en su salud, que impedirán a muchos trasladarse hasta la capital para presentar su testimonio.
Durante un juicio de primera instancia finalizado en enero de 2013 dos médicos y un técnico fueron condenados a 18 meses de prisión y un período igual en régimen domiciliario, así como al pago de multas de entre 10 mil y 20 mil euros.
Otros cuatro acusados, entre ellos la directora departamental de salud pública y la principal responsable del centro hospitalario, resultaron exonerados y no serán juzgados de nuevo.
El caso está considerado como el más grave accidente radioterapéutico en la historia médica del país, tanto por sus consecuencias como por el prolongado período de tiempo en el cual ocurrieron los hechos.
Philippe Stabler, presidente de la asociación de afectados, aseguró estar listo para esta nueva pelea y agregó que espera de los magistrados, por lo menos, la ratificación de las condenas dictadas en el anterior proceso.
Señaló Stabler que para las víctimas es una dura prueba asistir al juicio pues con el paso del tiempo muchos están fatigados y su salud se ha deteriorado, sobre todo ante la ausencia de un tratamiento específico destinado a las sobredosis de radiación.
«La lucha por la indemnización de los daños físicos fue difícil, pero hoy día todos la recibieron, sin embargo, la compensación por los perjuicios morales y la ansiedad sufrida aún está lejana», precisó.
El accidente fue más grave debido a la coincidencia de dos variantes diferentes. Una de ellas consistió en un error en la calibración del programa informático diseñado para manejar el equipo.
Por otra parte, a muchos pacientes se les recetaron dosis elevadas de radiación sin tomar en cuenta que recientemente habían recibido ese tipo de tratamiento.
Según Stabler, un consuelo para las víctimas es saber que desde el escándalo provocado por el caso mejoraron considerablemente las medidas de seguridad y se duplicó el número del personal especializado en esta materia.

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