(NG) Durante su exposición ante los líderes mundiales, el jefe del Ejecutivo compartió la experiencia de México en la implementación de las reformas estructurales, al aseverar que con estos cambios se podrá cumplir uno de los objetivos económicos del país, que es elevar la tasa de crecimiento en al menos dos puntos porcentuales este año.
En el primer retiro de líderes del G20 realizado en el Queensland Parliament Housea, señaló que esta meta coincide con la propuesta del G20 de implementar las medidas necesarias para aumentar colectivamente el PIB de los países miembros en dos por ciento respecto a lo estimado para 2018.
Peña Nieto, quien fue el orador inicial, expuso que en el proceso reformador fue fundamental la apertura para incorporar propuestas de los diferentes partidos políticos en aras de una construcción flexible de mayoría con el involucramiento de los liderazgos de las principales fuerzas para lograr el consenso: “México comparte con el mundo este exitoso proceso transformador, resultado del pragmatismo y la suma de esfuerzos de todos los mexicanos”, señaló en la casa del Parlamento de Queensland.
El Presidente de México destacó el papel del G20 y sus representantes durante los tiempos difíciles de la economía mundial.
“ Ayudó a prevenir un colapso económico en medio de la crisis financiera global de 2008. Hoy, el propósito principal del G20 es fortalecer el crecimiento económico, promover la generación de empleo y, sobre todo, crear oportunidades para la población mundial, particularmente para los más vulnerables”, destacó en su colaboración para la publicación oficial de este organismo.
Dijo que acorde con los compromisos de las 20 economías más desarrolladas en el mundo, México ha avanzado con una agenda de transformación histórica, cubriendo, entre otros asuntos, su sistema educativo, el mercado laboral y las finanzas públicas.
En el caso de la Reforma Energética, “es la transformación económica más trascendental en los últimos 50 años. Moderniza el marco constitucional para mantener la propiedad del Estado sobre los recursos energéticos, mientras abre el sector a la inversión privada, la tecnología y la competencia, permitiendo al país aprovechar completamente sus vastos recursos naturales.
“Esta reforma permite la competencia entre empresas estatales e individuos privados en todas las actividades de energía, fortalece a las compañías públicas y a los reguladores, y aumenta la transparencia y la rendición de cuentas, mientras protege el medio ambiente y promueve el uso de energía limpia”, sostuvo.
En cuanto a la reforma de competencia económica, otorga nuevos poderes a la Comisión Federal de Competencia, el nuevo regulador autónomo.
“El comercio y la competencia son poderosos promotores del crecimiento que pueden resultar en niveles de vida más elevados.
“En la reducción del proteccionismo, México continúa siendo un firme creyente en el liberalismo comercial, ya que ha experimentado un desarrollo positivo de su economía desde el Tratado de Libre Comercio de América del Norte con Estados Unidos y Canadá, así como otros nueve acuerdos de libre comercio, conglomerando 45 países en la red de libre comercio de México”, relató.
Peña Nieto cerró así su participación en la Cumbre de Líderes del G20, un día antes de que concluya, para regresar a México y atender de manera personal la situación que vive el país.