Washington, 15 dic (PL) Científicos de la Universidad de Las Vegas identificaron y caracterizaron el mineral que compone el 38 por ciento del planeta, con la ayuda de un antiguo meteorito y rayos X de alta energía.
El nuevo mineral aceptado por la Comisión de Nomenclatura y Clasificación de Nuevos Minerales de la Asociación Mineralógica Internacional fue llamado Bridgmanita en honor de su descubridor, el físico Percy Bridgman, laureado con el Nobel en 1964 y pionero en la investigación de materiales a muy altas presiones.
El geólogo Oliver Tschauner consiguió aclarar las condiciones en las cuales, en las profundidades del planeta, se forma el mineral más abundante de la Tierra, una mezcla extraordinariamente densa de silicatos, hierro y magnesio.
Para averiguar la composición de las capas más internas de la Tierra, los investigadores necesitan someter los más variados materiales a presiones y temperaturas extremas, recreando en laboratorio las duras condiciones en las profundidades del mundo.
Durante décadas los geólogos creían que la Bridgmanita, una estructura de gran densidad, constituye cerca del 38 por ciento del total de la masa terrestre, y que la propiedades físicas y químicas de ese mineral ejercen gran influencia en la forma en que los diferentes elementos y el calor fluyen a través del manto.
Los estudiosos examinaron una sección del meteorito Tenham, una condrita que cayó en Australia en 1979. En su interior, los gránulos de Bridgmanita eran escasos y de menos de un micrómetro (una millonésima de metro) de diámetro, por ello los investigadores usaron un haz de rayos enormemente condensado.
La primera muestra natural de Bridgmanita contenía una cantidad inesperadamente alta de hierro férrico, muy superior al de las muestras sintéticas. También contenía más sodio que la mayoría de las muestras creadas en los laboratorios.