Madrid, 24 dic (PL) El rey Felipe VI consideró hoy necesario abrir una profunda regeneración de la vida colectiva española y cortar de raíz la corrupción, en su primer mensaje de Navidad tras su proclamación el pasado junio.
El mensaje del monarca estuvo precedido por la expectativa creada por la imputación hace dos días de su hermana Cristina de Borbón, sexta en la línea de sucesión monárquica, como cooperadora del fraude de su marido, Iñaki Urdangarin.
Felipe VI no hizo referencia explícita al caso, de forma similar al mensaje pronunciado en 2011 por su padre, Juan Carlos I, cuando explotó el escándalo de Urdangarin, sin afectar a la infanta Cristina en ese momento.
Entonces el rey Juan Carlos afirmó que la justicia es igual para todos y también evitó mencionar los nombres de los implicados en la trama mediante la cual Urdangarin se apropió de más de seis millones de euros de administraciones públicas.
Ahora Felipe VI afirmó que la lucha contra la corrupción es un objetivo irrenunciable, pues los ciudadanos necesitan estar seguros de que el dinero público se administra para los fines legalmente previstos.
Igualmente consideró una prueba del funcionamiento del Estado de derecho el que los responsables de conductas irregulares estén respondiendo de ellas.
El monarca también estimó necesario respetar la Constitución y realizar un esfuerzo de reencuentro para construir un proyecto que garantice la pluralidad y genere ilusión en Cataluña, donde se registra un creciente movimiento independentista.
Preservar la unidad desde la pluralidad es uno de los grandes retos de España junto a la regeneración de la vida política, la recuperación de la confianza de los ciudadanos en las instituciones y garantizar el Estado de Bienestar, en opinión de Felipe VI.
Al mismo tiempo admitió que la situación económica continúa siendo un motivo de grave preocupación y requiere de los diferentes sectores trabajar unidos en la lucha contra el paro, que consideró mantiene límites inaceptables.