Estocolmo, 27 dic (PL) El Gobierno sueco pudo solventar hoy la mayor crisis política del país en décadas al anunciar un acuerdo con la oposición para anular la capacidad de desestabilización de la ultraderecha y evitar elecciones anticipadas.
En una conferencia de prensa en esta capital, luego de otra en la cual tres semanas atrás convocó a comicios para marzo próximo ante el rechazo del presupuesto en el Parlamento, el primer ministro Stefan Lofven anunció «orgulloso» el gran pacto pro-estabilidad de la centroizquierda y la centroderecha de su país.
Así lo reseño la edición digital del diario Aftonbladet y con ello, añadió, la coalición formada por los socialdemócratas, de Lofven, y los Verdes, quienes gobiernan en minoría, permanecerán en el poder.
En las conversaciones participaron, además de las formaciones políticas mencionadas anteriormente, cuatro partidos de la Alianza, que representan a la centroderecha.
Comentarios difundidos en la prensa destacaron que una de las intenciones detrás de estos planes es poner fin a la crisis provocada por la extrema derecha, con las Demócratas de Suecia (DS) a la cabeza, que pretenden cambiar, entre otros aspectos, la política de inmigración al considerarla demasiado generosa.
Tras los últimos comicios de septiembre pasado, DS se convirtió en una pieza clave dentro del Parlamento, con un 14 por ciento de los escaños, sobre todo, debido a la existencia de un legislativo muy fragmentado.
El anuncio de Lofven llega tres días antes de que concluya el plazo oficial que tenía el Ejecutivo sueco para convocar formalmente a elecciones parlamentarias.
De acuerdo con medios nacionales, el acuerdo, el cual durará hasta 2022, fija definitivamente que el presupuesto de 2015 será el presentado por los conservadores de la oposición, pero con enmiendas, e incluye áreas de cooperación en los ámbitos de defensa, energía y pensiones.
Hace unas semanas, la Alianza presentó un presupuesto alternativo en el Parlamento y los DS lo apoyaron, con lo cual rompieron la práctica habitual en Suecia de abstenerse para, en pos de la estabilidad, permitir que un gobierno en minoría saque adelante sus cuentas.
Luego de esos acontecimientos, Lofven tenía dos opciones: presentar su dimisión, con lo que se iniciaría una nueva ronda de consultas del presidente del legislativo con todos los líderes de los partidos, o convocar a elecciones anticipadas.
De cualquier forma, según analistas políticos, la crisis se desataría más tarde o más temprano, pues es una consecuencia de la precaria situación parlamentaria de la Socialdemocracia, tras el apretado triunfo en los comicios hace tres meses.
Socialdemócratas y ecologistas suman 138 de los 349 escaños habilitados, frente a 21 del Partido de la Izquierda, su socio externo, 141 de la Alianza y 49 obtenidos por DS.
Lofven resultó elegido jefe del Ejecutivo a principios de octubre gracias a la abstención de los diputados de la Alianza.
En Suecia basta con no tener una mayoría en contra para ocupar ese cargo.
Por el momento se cataliza la tensa situación del mapa político en esta nación escandinava, al detener las primeras elecciones anticipadas desde 1958, aunque, de acuerdo con los especialistas y los reportes difundidos, se pueden esperar en las próximas horas reacciones contrarias al anuncio del Primer Ministro por parte de DS.
Logran en Suecia acuerdo para evitar elecciones anticipadas
