Washington, 30 dic (PL) La Administración Nacional de la Aeronáutica y el Espacio (NASA) informó hoy que su nave Wind, junto con otras 17 sondas, cumplen dos décadas aportando datos sobre el viento solar.
La misión Wind forma parte del Observatorio de Sistemas de Heliofísica; se trata de una flota de naves espaciales dedicadas a la comprensión de cómo el Sol y sus explosiones gigantes afectan a la Tierra, los planetas y más allá.
Wind fue lanzada el 1 de noviembre de 1994, con el objetivo de caracterizar el flujo constante de partículas del Sol llamado viento solar.
Con observaciones de partículas una vez cada 3 segundos, y 11 mediciones magnéticas cada segundo, las mediciones de viento eran – y siguen siendo – las observaciones del viento solar de más alta cadencia registradas por cualquier nave espacial cercana a la Tierra.
Durante sus más de 20 años en el espacio, la misión ha tomado posiciones en varios lugares alrededor de nuestro planeta para ayudar a determinar cómo interactúa el espacio cercano a la Tierra con la energía entrante de las partículas del Sol.
La evaluación de las complejas variaciones de las partículas cargadas que forman el viento solar no se puede hacer desde un único punto en el espacio.
La flotilla original, denominada Global Geospace Science (GGS), se componía de la nave espacial Polar observando la magnetosfera de la Tierra en las latitudes altas, la Equator-S haciendo mediciones magnetosféricos ecuatoriales, y la japonesa Geotail patrullando la cola magnética alargada.
Se le denomina así a la larga cinta de la magnetosfera que va a la zaga de la Tierra, lejos del Sol; el programa original GGS se extendió rápidamente con misiones adicionales para formar el Programa Solar Terrestre Internacional o ISTP.