La Delegación Milpa Alta impulsa programas y acciones para mantener y mejorar los servicios ambientales que generan para la comunidad y la Ciudad de México, las 28 mil 375 hectáreas de suelo de conservación que hay en la demarcación, aseguró Víctor Hugo Monterola Ríos, jefe delegacional.
Al respecto, comentó que para lograr la preservación del suelo de conservación, es necesaria la participación de los habitantes, productores, agricultores, ejidatarios y comuneros, quienes en este 2014 fueron beneficiados con recursos económicos, como en el caso del Programa para el Desarrollo Rural Sustentable de Milpa Alta (PRODERSUMA), cuyo presupuesto es de 6 millones 461 mil 831 pesos, para la ejecución de 337 proyectos en beneficio de 667 productores.
“Entre los proyectos destacan la construcción de muros de piedra acomodada para la conservación de suelos agrícolas, instalación de sistemas de captación de agua pluvial, establecimiento y manejo de huertos frutícolas y de traspatio, prácticas agroecológicas, fortalecimiento del ecoturismo rural y la elaboración de publicaciones de educación ambiental, producción y conservación de la biodiversidad genética del maíz nativo”, detalló
Asimismo, con la participación de ejidatarios, estudiantes y población en general, la Delegación realizó la reforestación de 3 mil 800 árboles frutales y forestales y el saneamiento de 179 árboles infestados, en el marco del “Proyecto para el Control y Manejo de Muérdago en la Ciudad de México”.
Víctor Hugo Monterola señaló que otro de los trabajos que se efectuaron fue la implementación 232 acciones de control y combate de incendios a través de chaponeo, limpieza de brechas corta fuego en la zona agroforestal e interpoblacional, así como vigilancia en coordinación operativa con la Comisión de Recursos Naturales y la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México.
“También pusimos ¡Manos a la Obra! en la protección y conservación de barrancas, a través de jornadas para su saneamiento, con participación comunitaria, retirando 14.87 toneladas de residuos sólidos, para conservar su función ambiental”, destacó.
Asimismo, para mantener el control de la contaminación ambiental en áreas agrícolas e impactadas por asentamientos humanos, la Delegación implementó 99 jornadas comunitarias, liberando de residuos sólidos una superficie de 33.55 hectáreas.
En el tema de la vigilancia ambiental, “efectuamos 523 recorridos para inhibir la incidencia de ilícitos ambientales en el suelo de conservación, tales como: tala de arbolado, depósito de cascajo, construcciones irregulares, emitiendo los reportes correspondientes para que las instancias tanto locales como federales con atribuciones en la materia inicien los procedimientos administrativos correspondientes”, finalizó.