La contaminación alcanzó niveles peligrosos para la salud humana en esta capital y otras ciudades de China, como ocurrió el miércoles y jueves al ubicarse más de 20 veces por arriba de los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Autoridades capitalinas de protección ambiental emitieron una alerta amarilla, la tercera más grave, luego del incremento de las partículas PM2.5, que tienen un diámetro lo suficientemente pequeño que les permite entrar en los pulmones.
Los niveles de partículas PM2.5, que son consideradas “muy peligrosas” para la salud, se elevaron este jueves hasta los 568 microgramos por metro cúbico, muy superior al máximo de 25 microgramos recomendado por la OMS para garantizar la seguridad de las personas.
Desde la noche del miércoles, una espesa niebla tóxica, que reduce la visibilidad a menos de 500 metros, afecta a Beijing, Tianjin y otras zonas de las provincias de Hebei, Shandong, Henan, Jiangsu, Hunan, Jiangxi, Guizhou, Guangxi, Fujian, Yunnan y Sichuan.
Los altos niveles de contaminación son atribuidos a la detonación de juegos pirotécnicos para recibir el año 2015, pero sobretodo a la neblina que ha afectado la capital desde el fin de semana, por las bajas temperaturas del invierno.
La alerta amarilla de contaminación, la tercera más alta en el sistema de cuatro niveles, entró en vigor desde el sábado, aunque la Oficina Meteorológica estimó que la condiciones adversas se mantendrán al menos hasta mañana viernes.
Además de Beijing, otras ciudades sufren por la contaminación, aunque en niveles menos graves, entre ellas Tianjin, en la provincia de Hebei, y varias partes de Shanxi y Sichuan, según un reporte de la agencia estatal de noticias Xinhua.
El Ministerio de Protección Ambiental ordenó, desde fines de 2014, a las autoridades de grandes zonas industriales en Beijing, Tianjin y Hebei, entre otras regiones, informar diariamente a la población la calidad del aire, para tomar medidas preventivas.
Entre las acciones, las autoridades limitan el uso de los automóviles y restringen parte de la actividad industrial para tratar de controlar la mala calidad del aire, recomienda no hacer actividades al aire libre y el uso de cubre-bocas, además de evitar salir de sus casas.
De acuerdo con la OMS, la contaminación ambiental provoca anualmente la muerte de al menos 1.3 millones de personas en todo el mundo.
Fuente: insurgentepress