París, 19 ene (PL) La afirmación de que las situaciones de crisis lo alteran todo cobra hoy especial fuerza en Francia, donde la socavada popularidad del presidente François Hollande repuntó tras los ataques violentos.
Según un sondeo del instituto Ifop, el aumento es de 21 puntos porcentuales, con lo cual la medición se ubicó en los 40 puntos, el nivel al que estaba a finales de 2012.
De esa forma, el mandatario más impopular de la llamada V República, iniciada en 1958, goza en estos momentos de una mejor opinión de los habitantes de la nación gala, quienes aprueban la manera como ha manejado la situación tras los atentados.
Similar suerte corre por estos días la figura del primer ministro Manuel Valls, también favorecido en las recientes.
Los principales rivales políticos de Hollande, el expresidente Nicolas Sarkozy, de la conservadora Unión por un Movimiento Popular, y Marine Le Pen, del ultraderechista Frente Nacional, opinan que el actual inquilino del Elíseo ha estado a la altura de las circunstancias.
Sin embargo, algunos analistas señalan que podría tratarse de un repunte efímero de la popularidad. La insatisfacción de la población con relación a la gestión presidencial ante problemas domésticos como el incremento del desempleo y el insuficiente crecimiento económico, podrían recobrar protagonismo en cualquier momento.
Desde su llegada al poder en mayo de 2012, Hollande prometió revertir la curva ascendente del paro. Sin embargo, no ha podido solucionar uno de los problemas que más golpea a los habitantes de esta nación europea.
El número de individuos sin trabajo llegó en noviembre a 3,48 millones, lo cual representa un aumento de 0,8 por ciento con respecto a octubre y un alza de 5,8 puntos en la comparación interanual, según las más recientes estadísticas difundidas por la estatal oficina Pôle Emploi. Si se añaden las personas que ejercieron alguna pequeña actividad y las que estaban en busca de trabajo, la cifra alcanza los 5,17 millones.
Expertos vinculan la situación del mercado laboral al estancamiento del Producto Interno Bruto como consecuencia de las medidas de austeridad aplicadas en la Eurozona para contener el incremento del déficit y la deuda pública.
Popularidad de presidente francés favorecida tras ataques
