Moscú, 23 ene (PL) El presidente ruso, Vladimir Putin, adjudicó hoy la responsabilidad al gobierno ucraniano por la muerte de civiles inocentes, tras los ataques indiscriminados a zonas residenciales del Donbass con artillería pesada y sistemas coheteriles múltiples.
Putin pidió este viernes un minuto de silencio por las 15 víctimas mortales que causó el impacto ayer de un proyectil de grueso calibre sobre un estacionamiento del transporte público en Donetsk.
Al intervenir durante una sesión del Consejo de Seguridad de Rusia, el mandatario afirmó que la responsabilidad por la muerte de decenas de personas recae sobre quienes dan «órdenes criminales de golpear zonas densamente pobladas».
Observó que el resultado de las decisiones de Kiev de iniciar acciones combativas en total magnitud han sido las decenas de asesinados y heridos, no solo entre los militares de ambas partes, sino entre la población civil.
Es mucho más trágica, consideró el jefe del Kremlin, la masacre de niños, ancianos y mujeres, a consecuencia del empleo de la artillería pesad, los sistemas de fuego múltiple y la aviación, sin una selección, reprodujo el canal 24 horas.
Lamentó el estadista que mientras la situación en el sureste ucraniano se deteriora, Rusia no recibió aún respuesta a las propuestas enfiladas al cumplimiento de los acuerdos de Minsk, del 5 y 19 de septiembre, relativos al despliegue de la técnica pesada de las partes en conflicto y la delimitación de la zona de seguridad.
No solo no hemos recibido contestación clara sino que hemos visto las acciones contrarias de las autoridades de Kiev en cuanto a los combates a gran escala a lo largo de todo del perímetro de confrontación entre las partes beligerantes, enfatizó Putin ante los miembros permanentes del Consejo.
Coincidió el presidente ruso, a tono con los pronunciamientos de la cancillería, en que el conflicto ucraniano solo puede solucionarse mediante negociaciones pacíficas y medidas de carácter político.
El pasado día 15 Putin remitió al mandatario ucraniano, Petro Poroshenko, una misiva con la propuesta de iniciar de inmediato la retirada del armamento pesado hacia la línea de contención, en conciliación de las partes del conflicto: Kiev y las regiones rebeldes de Donetsk y Lugansk.
Al respecto, Putin dijo sin ambages que el apego de Poroshenko a la paz se queda solo en palabras, pues en la práctica provoca un nuevo brote de confrontación.
Recordó que la ubicación de la línea, con previa concertación entre las partes, debía ser a una distancia tal desde donde no se podría asestar golpes contra las poblaciones. Quisiera añadir que esa propuesta coincidió totalmente con las exigencias de la propia Kiev, recalcó el gobernante ruso.
Insistió en que toda esa complicada situación acontece con el acompañamiento de consignas propagandísticas de una supuesta paz y la búsqueda de culpables, cuando los verdaderos responsables son aquellos que dan «las ordenes criminales». Confío en que se imponga el sentido común por parte de Kiev, expresó Putin.
Mientras tanto, la ONU advirtió en un comunicado que las cifras de víctimas del conflicto ucraniano superan los cinco mil muertos y que están actualizando las estadísticas a raíz de los recientes ataques en Donetsk.
Rusia responsabiliza a Ucrania por muertes de civiles inocentes
