Bloqueo administrativo de sitios web es un hecho en Francia

París, 6 feb (PL) El bloqueo administrativo de sitios web que hagan apología de terrorismo entró en vigor hoy en Francia en medio de críticas por el irrespeto que puede llegar a significar para la libertad de expresión.
De esa forma, por orden del Ejecutivo y sin control judicial, una autoridad administrativa tiene la potestad para demandar a los proveedores de los servicios de Internet, el bloqueo de portales que consideren promueven actos terroristas, precisa el periódico oficial del Estado.
Una vez realizada esta operación, quienes intenten acceder al sitio, son dirigidos hacia una página de información del Ministerio del Interior.
El decreto indica que los bloqueados serán verificados trimestralmente a fin de determinar si todavía presentan contenidos que se consideren ilícitos. En caso de que estos hayan desaparecido, podría iniciarse un procedimiento para reabrir el portal en cuestión.
La disposición genera crítica de los defensores de las libertades en el ciberespacio quienes argumentan la falta de garantías judiciales, por ser a menudo discutible si unas declaraciones constituyen apología del terrorismo o no.
También opinan que podría aumentan la probabilidad de que los dirigentes políticos franceses vayan añadiendo progresivamente nuevas restricciones.
El bloqueo de sitios sin intervención judicial había sido votado en la nación gala en 2011, pero los decretos de aplicación no se habían publicado. En aquel entonces, solo concernía a las páginas que presentaban contenidos sobre pornografía infantil.
A casi un mes de ataques perpetrados en París, el gobierno insiste en hacer de la lucha contra el terrorismo una de sus principales directrices, con el alegado objetivo de garantizar la seguridad nacional.
El 28 de enero pasado puso en línea un sitio web con el fin de actuar contra la amenaza terrorista que, a juicio del Ejecutivo, se encuentra en su nivel más alto.
El sitio se compone de cuatro grandes apartados: comprender la amenaza terrorista, la acción del Estado, descifrar la propaganda yihadista y la movilización conjunta de toda la sociedad.
Analistas advierten sobre la posibilidad de que los últimos acontecimientos sean utilizados para intentar justificar determinadas acciones como la intervención en conflictos armados en el exterior.
También consideran hasta cierto punto contradictorio que el gobierno adopte este tipo de medidas cuando desde el primer momento calificó los ataques de enero como un atentado contra la libertad de prensa y de expresión.

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