Naciones Unidas, 8 feb (PL) La lenta reconstrucción de la Franja de Gaza, la escalada de violencia en Ucrania, la sesión inicial del Comité para reestructurar la deuda soberana y la ofensiva terrorista de Boko Haram despertaron esta semana interés en Naciones Unidas.
Devastada por tres agresiones israelíes en los últimos cinco años, Gaza enfrenta una aguda crisis humanitaria, agravada por la falta de recursos para mejorar las condiciones de vida de cientos de miles de palestinos.
En ese sentido, los secretarios generales de la ONU, Ban Ki-moon, y la Liga de Estados Árabes, Nabil el Araby, instaron a la comunidad de donantes a cumplir lo antes posible los compromisos asumidos en la Conferencia de El Cairo, en octubre pasado.
Alrededor de cinco mil 400 millones de dólares fueron ofrecidos en la capital egipcia para la reconstrucción de Gaza, contra la cual Tel Aviv lanzó el verano pasado 50 días de bombardeos aéreos e incursiones terrestres, con saldo de dos mil 100 muertos, 10 mil heridos y decenas de miles de viviendas dañadas o destruidas.
Necesitamos el desembolso de esos recursos, incluyendo los destinados a las agencias de Naciones Unidas presentes en la Franja, en aras de evitar que se deteriore aún más la ya dura situación humanitaria, advirtieron Ban y Nabil en un comunicado.
Respecto a la crisis en el sureste de Ucrania, la ONU reiteró los llamados a detener las hostilidades y respetar los protocolos pactados en septiembre en Minsk.
Para la organización, alrededor de cinco mil 400 muertos y un millón 600 mil desplazados internos y externos resultan más que suficientes para impulsar la búsqueda de la paz duradera entre el gobierno y los rebeldes federalistas.
El Secretario General y otros altos funcionarios expresaron preocupación por la escalada de los bombardeos en la región del Donbass, donde los insurgentes proclamaron la independencia de Donetsk y Luhansk, en rechazo al golpe de Estado de febrero de 2014, las elecciones que le siguieron y la postura radical y anti-rusa de las nuevas autoridades de Kiev.
Al menos 200 civiles han perdido la vida en el sureste ucraniano desde que a mediados de enero el ejército reanudara los bombardeos a posiciones rebeldes, quienes respondieron con acciones militares.
También destacó en la semana la primera sesión del Comité de Naciones Unidas sobre el Proceso de Reestructuración de la Deuda Soberana, que celebró tres días de trabajo y eligió a Bolivia para encabezar el órgano creado en diciembre por la Asamblea General.
Sobresalió en el foro el interés de impulsar un marco legal multilateral, que ayude a la estabilidad del sistema financiero internacional y proteja a los países del sur de la voracidad de los fondos especulativos (llamados fondos buitre).
La cuestión de los fondos buitre cobró fuerza el año pasado, a partir de la batalla de Argentina con compradores de títulos de deuda respaldados por el juez norteamericano Thomas Griesa quien dictaminó que Buenos Aires debía pagarles el mil 600 por ciento de lo abonado para adquirir los documentos.
En el caso de Boko Haram, el Consejo de Seguridad condenó la escalada de sus ataques en Nigeria y Camerún, y pidió a la región coordinar una respuesta militar que frene la ofensiva de los islamistas.
El órgano de 15 miembros -presidido este mes por China- rechazó en una declaración las acciones de los extremistas contra la población civil y las tropas chadianas, que apoyan a sus vecinos en el enfrentamiento al grupo radical que opera desde 2009.
Los primeros días de febrero han sido testigos de una escalada de la violencia por parte de Boko Haram, con decenas de personas asesinadas en poblados fronterizos, como el camerunés Fotokol, y la muerte de 13 soldados chadianos.
El pasado fin de semana, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, respaldó las iniciativas de la Unión Africana (UA) de establecer una fuerza multinacional para enfrentar a Boko Haram.
Ban fijó su postura durante la celebración en Addis Abeba, Etiopía, de la XXIV Cumbre de la UA.
Gaza, Ucrania, deuda soberana y Boko Haram centran agenda de ONU
