París, 8 feb (PL) La nueva composición de la Asamblea Nacional francesa se define hoy en la segunda vuelta de las elecciones legislativas parciales, que tuvieron como preámbulo una fuerte pugna de intereses en la última semana.
Desde la primera ronda, efectuada el pasado domingo, el gubernamental Partido Socialista (PS) se juega la mayoría en ese ente legislativo, al disputar el escaño de Pierre Moscovici, antiguo ministro de Economía de la administración de François Hollande y exdiputado por el departamento de Doubs (este del país).
Moscovici tuvo que dejar su puesto cuando fue nombrado comisario europeo de Asuntos Económicos, hace unos pocos meses, en noviembre de 2014.
El candidato del PS, Frédéric Barbier, con aproximadamente el 30 por ciento de los votos en la primera ronda, y la del ultraderechista Frente Nacional (FN), Sophie Montel, que logró el 34, se verán las caras en esta segunda.
Los resultados del domingo 1 de febrero mostraron una baja participación ubicada en el entorno del 35 por ciento, en comparación con el 65 por ciento de 2002 y del 60 de 2007 y 2012.
Expertos llamaron la atención sobre este hecho, teniendo en cuenta que ocurrió tres semanas después de los atentados que tuvieron lugar en París y un mes y medio antes de las elecciones departamentales.
El PS dispone de 289 escaños en la Asamblea. Como es de esperar, altos funcionarios del gobierno, como el primer ministro Manuel Valls, insistieron en recabar apoyo para el representante del partido en el poder, Frédéric Barbier.
Junto a Barbier se presentaron candidatos de la izquierda; de la conservadora Unión Movimiento Popular (UMP), de Nicolás Sakozy, que quedó eliminada; y del FN, de Marine Le Pen.
El FN logró en Doubs el 36 por ciento de los votos en las elecciones europeas de 2014, por lo que ahora aspira a llegar al primer lugar de estas parciales con su postulante, la eurodiputada Sophie Montel.
Acorde con información divulgada, Montel explotó durante las últimas semanas de campaña el «peligro islamista», sobre todo tras los atentados. Si volviera a ser la primera en la segunda vuelta ocuparía el tercer escaño del FN en la Asamblea Nacional francesa.
En los últimos días el expresidente Nicolás Sarkozy, líder de la UMP, se inclinó por no votar al FN, pero tampoco pedir apoyo para el PS, una posición que acrecentó las divisiones en el seno de su partido.
Segunda vuelta definirá nueva composición de Asamblea francesa
