Roma, 9 feb (PL) Al menos 29 inmigrantes fueron hallados hoy sin vida por la guardia costera italiana a bordo de una embarcación frente a las costas de la isla de Lampedusa.
El resto de los pasajeros a bordo del barco, donde según la edición digital del diario La Repubblica, había cerca de 105 personas, fueron rescatados y trasladados a instalaciones hospitalarias de la mencionada isla.
De acuerdo con las investigaciones preliminares realizadas por las autoridades y publicadas en el citado medio, los inmigrantes murieron de hipotermia, mientras intentaban llegar a Italia a través del peligroso estrecho de Sicilia.
Las condiciones climáticas, desataca la prensa, contribuyeron, además, a los decesos de los refugiados e impidieron se pudieran agilizar las tareas de salvamento desplegadas por el Centro Nacional de Rescate de la Guardia Costera de Italia.
Según declaró el vocero de esa entidad, Filippo Marini, la situación era realmente dramática, con olas que alcanzaban hasta ocho metros de altura.
Marini añadió que en estos momentos también se efectúan labores para detectar el paradero de otra embarcación, reportada por las autoridades españolas, aunque aún no hay indicios de la ubicación o existencia de la misma.
Reportes difundidos en medios nacionales de comunicación indicaron que los médicos responsables de atender a las víctimas y al resto de la tripulación denunciaron la precariedad de las embarcaciones utilizadas para el rescate del personal, lo cual, en su opinión, influye en el incremento de muertes de indocumentados.
Agregaron que las cifras de decesos durante un tiempo dejaron de ser tan alarmantes como ahora, debido a la existencia de la ya extinta operación de búsqueda y rescate Mare Nostrum, cerrada por el gobierno italiano debido a problemas para sufragar los gastos económicos de las incursiones.
Luego, la Unión Europea (UE) arrancó una nueva misión denominada Operación Tritón, con el objetivo de responder a las incesantes solicitudes de apoyo desde Italia.
Sin embargo, comentarios divulgados en la prensa internacional critican frecuentemente la efectividad de Tritón, al denunciar que no está diseñada para salvar vidas, sino para apoyar la labor de los estados miembros de la UE en el control de las fronteras en el Mediterráneo.
Antes del cierre de Mare Nostrum, implementada tras otra tragedia cerca de las costas de Lampedusa donde perdieron la vida unos 300 refugiados en octubre de 2013, las estadísticas señalaban que el gobierno de Italia logró salvar alrededor de 155 mil personas.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados calcula que, al menos, tres mil 419 inmigrantes murieron en el Mediterráneo en 2014, víctimas de grupos criminales encargados de organizar viajes clandestinos, sobre todo, desde zonas de extrema pobreza o con conflictos armados.