La Paz, 21 feb (PL) El Corso de Corsos, la fiesta que cierra el carnaval en la central ciudad boliviana de Cochabamba, arrancó hoy con la participación del presidente Evo Morales y más de 20 mil bailarines en representación de más de 130 comparsas.
También conocido como el Carnaval de la Concordia, la fiesta se inicia en la mañana y se extiende hasta la llegada de la noche, para ponerle fin a varios días de música y actividades típicas de la región.
El alcalde del municipio de Cercado, donde se encuentra la parte metropolitana de la ciudad, Armando Vargas, preside el festejo junto a Morales, en el cual participa también el recién investido ministro de Culturas Marko Machicao.
Machicao aseguró a la prensa en la apertura del Corso que unos 150 mil turistas nacionales y extranjeros participan de la fiesta, lo cual generará un movimiento económico cercano a los 45 millones de bolivianos (seis millones y medio de dólares) en beneficio del departamento de igual nombre.
Sin embargo, aclaró que, «más allá de lo económico, esperamos que todos los cochabambinos y bolivianos vivamos una verdadera fiesta de la integración».
El carnaval de Cochabamba se celebra, a diferencia de otros, en varios momentos, y comienza con el jueves de compadres, seguido del de comadres a la siguiente semana, y luego el corso infantil (el domingo sucesivo), y el martes de Ch’alla -una especie de honor a la madre Tierra, hasta llegar al Corso de Corsos.
En esta fiesta, a la cual se da cita la mayoría de la población de la ciudad, se pueden apreciar las danzas de los Caporales, las Morenada, las Tobas, y los Negritos, entre otras manifestaciones artísticas.
El presidente Morales, muy ligado a Cochabamba desde sus años de dirigente cocalero, participó este año en los carnavales de varias de las principales ciudades bolivianas, entre ellos el de Oruro, considerado Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad por la Unesco.
Evo Morales participa en cierre de carnaval en Cochabamba
