Damasco, 21 (PL) Las recientes declaraciones del embajador sirio en la ONU, Bashar al-Jaafari, denunciando el carácter político de la Comisión de Investigación Independiente creada por resolución del Consejo de Derechos Humanos, fueron resaltadas hoy por medios locales de prensa.
El diplomático sirio confirmó además las reservas del gobierno de Damasco, acerca del trabajo de este grupo, en un comunicado de prensa emitido tras una reunión informal celebrada la víspera.
El encuentro fue pactado de manera informal por el Consejo de Seguridad de la ONU con miembros de la comisión que evalúa supuestas violaciones de derechos humanos en Siria.
«Esta comisión está sesgada y fue fundada con fines políticos y tiene una agenda oculta que sirve a los que apoyan el terrorismo en Siria», subraya el comunicado de prensa.
Según al-Jaafari, esta reunión informal se celebró fuera del marco del Consejo de Seguridad, y de este modo sólo representa las opiniones de los que hablaban en la misma.
Precisó que dicha comisión nunca ha visitado a Siria y sólo se basó en los testimonios de algunas personas que residen fuera del país árabe, particularmente en los campamentos en Turquía, Jordania, Líbano.
«La Comisión sigue ignorando los numerosos informes y las abundantes informaciones proporcionadas por el gobierno sirio desde hace años, lo cual evidencia la magnitud de su sesgo», enfatizó el diplomático sirio.
«Esta reunión -agregó- es parte de la crisis y nunca ha sido parte de la solución representada en ayudar a Siria para luchar contra el terrorismo que la está golpeando».
Al-Jaafari explicó que el gobierno sirio preparó un informe de 500 páginas que incluye información sobre los terroristas extranjeros muertos en Siria durante el mes de octubre del año 2013, y explicó que el documento contiene informaciones sobre nacionalidades, nombres y fotos.
En el informe presentado se explica además que muchos de estos extremistas son oriundos de Arabia Saudita, Qatar, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Libia, Egipto y otros países europeos, asiáticos y africanos.
«Entre estos terroristas figuran varios jordanos, entre ellos quien era considerado la mano derecha del terrorista Abu Musab al-Zarqawi, ex líder de al-Qaeda en Iraq», acotó el embajador sirio.
Denunció también el destino del armamento utilizado por los grupos terroristas en Siria procedentes de Libia, que entraron al país a través de Líbano, Turquía y Jordania, tema confirmado por el Comité de Naciones Unidas sobre la lucha contra el terrorismo.
El representante permanente de Siria en la ONU recordó que ya existen tres resoluciones sobre la lucha contra el terrorismo (2170, 2178 y 2199), para enfrentar al grupo Estado Islámico (EI) y el Frente al-Nusra, y sobre el cese de la financiación del terror y la compra de aceite y piezas históricas robadas de las bandas armadas.