Celebridades presionan a Obama para vetar oleoducto Keystone XL

Washington, 24 feb (PL) La reciente ganadora del Oscar a Mejor Actriz, Julianne Moore, y sus colegas Robert Redford, Alec Baldwin, Mark Ruffalo, y músicos como Willie Nelson piden hoy el veto del presidente Barack Obama para el oleoducto Keystone XL.
Las celebridades se unieron al reclamo de ambientalistas, científicos y otros ciudadanos al firmar una carta publicada por el grupo 350.org, que reclama el veto inmediato del mandatario para el proyecto legislativo impulsado por los republicanos en ambas cámaras del Congreso.
La iniciativa -que da luz verde a unos ocho mil millones de dólares para la construcción del ducto desde las arenas bituminosas de Alberta, Canadá, hasta el Golfo de México- llega hoy al escritorio de Obama, quien según analistas debe vetarla de inmediato, tal como ha advertido una y otra vez la Casa Blanca.
El texto que circula este martes aboga por «un rechazo total» a la propuesta y pone énfasis en la responsabilidad del Presidente pues la decisión está sin dudas bajo su control.
Rechazando el oleoducto Keystone XL demostrará poderosamente su compromiso para detener el aumento del nivel de los océanos, sentar las bases para una mayor acción a favor del clima y construir un legado valioso, dice la misiva que también suscribió el cantante pop y actor Lance Bass.
La lista de firmantes incluye a propietarios de tierras, sindicatos, funcionarios electos y líderes tribales.
Según 350.org, Keystone XL «contribuirá de manera espectacular al cambio climático» pues el impacto total de la contaminación carbónica que generaría el proyecto sería el equivalente a 51 millones de automóviles en la vía.
La organización cita al Departamento de Estado para recordar que las arenas de alquitrán generan hasta un 19 por ciento más de gases de efecto invernadero que el combustible convencional.
Asimismo, los activistas contradicen los argumentos de los impulsores de Keystone XL al afirmar que el oleoducto acabará con más empleos que los que generará debido a los eventuales derrames tóxicos en tierras cultivables y recursos hídricos.
Señalan igualmente que apenas el 10 por ciento de los nuevos puestos laborales serían para trabajadores locales a lo largo de la ruta.
Los demócratas esperan que Obama actúe rápidamente en lesta cuestión para no desviar la atención de la controversia legislativa y judicial en torno al financiamiento del Departamento de Seguridad Interior, cuyos fondos -condicionados a la reversión de las acciones ejecutivas en materia migratoria- expiran en unos días.
De cualquier manera, los republicanos han advertido al jefe de la Casa Blanca que estaría equivocado si piensa que su veto será el fin de la batalla por Keystone XL.

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