Washington, 25 feb (PL) El presidente estadounidense Barack Obama planea defender hoy en Miami, estado de Florida, sus acciones migratorias, a la vez que recabar apoyos contra la decisión de un juez federal de suspender sus medidas favorables a los indocumentados.
La alocución del mandatario sobre ese tema será parte de prolongados esfuerzos, bloqueados por los republicanos, para arreglar el sistema de inmigración, el cual, según Obama y otros funcionarios de diferentes tendencias políticas, resulta disfuncional desde hace décadas.
Ocurre además mientras se encuentra atascada en el Capitolio la aprobación del presupuesto para el departamento de Seguridad Nacional (DHS), cuyo financiamiento de unos 40 mil millones de dólares los conservadores intentan condicionar con la anulación de las medidas tomadas por el Ejecutivo.
El pasado día 16, el juez de distrito de Texas, Andrew Hanen, decidió congelar las órdenes del gobernante, destinadas a posponer la deportación de unos cinco millones de indocumentados.
Al mismo tiempo, Hanen otorgó tiempo a una coalición de 26 estados de la Unión para imponer una demanda dirigida a eliminar definitivamente dichas provisiones.
La semana anterior debió iniciar la primera de las órdenes dictadas por Obama en noviembre de 2014, relacionada con el programa de Acción Diferida (DACA) que protege de la deportación a jóvenes inmigrantes que llegaron a esta nación norteña cuando eran niños (dreamers) y cumplen otros requisitos adicionales.
El DACA postergará por tres años su expulsión y les permitirá obtener un permiso de trabajo temporal.
Para el 19 de mayo próximo estaría vigente la mayor parte del programa del mandatario, que extiende esa protección a los padres de ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes que han vivido en el país durante algunos años.
La Casa Blanca anunció que interpondrá una demanda legal contra el dictamen del magistrado Hanen ante la corte federal de apelaciones del Quinto Circuito, situada en Nueva Orléans, estado de Louisiana.
La víspera, el gobernante calificó de irresponsable al Congreso estadounidense, de mayoría republicana, al abordar los problemas migratorios del país.
Sin embargo, hemos oído amenazas irresponsables para cerrar el DHS, la misma agencia encargada de asegurar nuestras fronteras y de proteger la seguridad de las personas que viven en Estados Unidos, por ninguna otra razón que un desacuerdo partidista sobre mis acciones, subrayó Obama en un artículo de su autoría publicado en el diario The Hill.
Obama busca defender en Miami acciones migratorias
