Washington, 9 mar (PL) El presidente estadounidense, Barack Obama, cargó hoy contra un grupo de senadores republicanos que dirigieron una carta a las autoridades de Irán con objetivo de torpedear las actuales negociaciones sobre el programa nuclear de esa nación.
Luego de que 47 republicanos advirtieran este lunes a Teherán de que un eventual pacto sobre el tema nuclear no pasaría de ser «un mero acuerdo ejecutivo», Obama aseguró que se mantendrá enfocado en las gestiones diplomáticas que lleva adelante junto a otras cinco potencias internacionales (Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania).
Asimismo, el gobernante expresó confianza en que una vez logrado un acuerdo -a través del cual se busca limitar el desarrollo nuclear iraní-, este se pueda implementar.
Creo que de cierta manera es irónico ver que algunos miembros del Congreso quieran hacer causa común con la línea dura en Irán (en referencia a quienes se oponen a las conversaciones), dijo Obama.
La carta, impulsada por el senador Tom Cotton (Arkansas), señala que sin anuencia del Congreso podría revertirse cualquier acuerdo.
Dicha movida de los republicanos causó la inmediata reacción del Ejecutivo y sus correligionarios demócratas, quienes alegaron que de esa manera se mina la autoridad presidencial para manejar la política exterior.
La escalada republicana contra las pláticas entre Irán y el G5+1 (los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, más Alemania) ya tuvieron la semana pasada un capítulo importante, cuando se consumó la invitación a hablar en el Capitolio del primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, uno de los más acérrimos enemigos de ese proceso.