Por Huemanzin Rodríguez El libro de las cosas y los cuerpos, es su más reciente publicación en México y se compone por dos tomos: “Los dos libros publicados ahora en Arlequín, son libros conceptuales, pueden ser una idea básica, un motor, un motivo que construye un libro como un universo interno”
(N22) Aleš Šteger es un joven poeta que se ha desenvuelto tanto en la narrativa como en la edición. En nuestro país se han editado colecciones de cuentos eslovenos seleccionados por él, así como su poemario Protuberanciasy El libro de las cosas y los cuerpos, editados por Arlequín.
Procedente de Liubliana, Eslovenia, el escritor señaló, para Agencia N22, que su país es muy pequeño pero “la lengua tiene una larga tradición y es una de las lenguas oficiales de la Unión Europea. No es muy conocida porque antes fuimos parte de Yugoslavia, y ahora comienza el conocimiento de la literatura eslovena en el mundo”.
El autor esloveno está familiarizado con México, dice tener varios vínculos, pero el más fuerte es la poesía. Señala que cuando tenía 15 años abrió un libro blanco con tres letras en la primera página “decía Paz. Eran poemas de Octavio Paz traducidos al esloveno. Eso me ha abierto un mundo muy divertido para mí, en este tiempo, diferente a como lo conocía. Era una de las grandes lecturas de mi vida”.
Gracias a Octavio Paz, Šteger viajó por México y América Latina, conoció la obra de César Vallejo y a además aprendió el idioma español.
El libro de las cosas y los cuerpos, es su más reciente publicación en México y se compone por dos tomos: “Los dos libros publicados ahora en Arlequín, son libros conceptuales, pueden ser una idea básica, un motor, un motivo que construye un libro como un universo interno”.
Aleš Šteger también ha creado acciones poéticas en los lugares donde ha viajado, en su instancia en México colaboró con un grupo de artistas en una acción donde escribía poemas in situ, en empatía por los desaparecidos en Ayotzinapa.
“Pienso que México tiene un problema muy similar, nosotros no tenemos este nivel de violencia como ahora está presente en México. Pero la pregunta es ¿qué hacer con los muertos, con las almas que flotan en el aire que no podemos olvidar pero queremos olvidar? ¿Cómo manejar estas cosas fuertes? ¡Eso me interesa!”,concluyó.