Nuestra intención es hacer toda la música posible, cumbia, metal, funk. El denominador del grupo es ser intrépido, tenemos sentido del humor muy cara palo y al final de cuentas ese es nuestro hilo conductor…
(N22) “Cuarenta y cinco grados y un chingo de cervezas y un montón de sombrerudos tirando fiesta….” pregonaba el grupo A Band of Bitches en 2012, cuando presentaron el primer single “Noreste caliente”… pero, ¿quiénes son éstos bitches?
Originarios de Monterrey, el sexteto sonoro tiene sólo un objetivo en mente: ofrecer música para la pista de baile con mezclas que vagan entre el folclor mexicano, el rock, el mambo y la electrónica.
La música que hacemos es “género variado, versátil”. Nuestra intención es hacer toda la música posible, cumbia, metal, funk. El denominador del grupo es ser intrépido, tenemos sentido del humor muy cara palo y al final de cuentas ese es nuestro hilo conductor, aseguró en entrevista para Agencia N22 Jonás González, creador del concepto.
4808 Chingadazos Musicales es el nombre de su segunda producción que, de acuerdo con el artista, contiene el sonido paposho que los caracteriza: La historia verdadera es que nos daba mucha hueva hacer un disco y ya estaban lo temas para hacer un E.P, entonces de ahí partimos. El nombre fue algo muy cómico porque estábamos trabajando con una disquera y ellos a los hits les llaman cañonazos musicales, entonces fue como una pequeña burla interna con ellos.“Hay rolas regionales y otras que se van para otro lado completamente, yo creo que más bien es un grupo que no tiene un género propio, y que está siempre saciando inquietudes”.
Con los rostros cubiertos como excusa para no cuidar una reputación, los integrantes de A Band of Bitches se han presentado en escenarios como El Vive Latino y recientemente el Siguientescena, Festival Internacional Querétaro 2015.
Sus shows en vivo recrean personajes, algo similar a lo que hicieron en los años grupos como Kiss o Alice Cooper, que recreaban historias.“Los temas de la banda a veces son temas densos y escabrosos, pero tratamos de torcerle el empaque o el marco para hacerlo humorístico. Lo que hacemos es arte, y no hay que tragársela toda”, finalizó Ushka Rappat, sobrenombre que utiliza González.