Ejército sirio mantiene ofensiva en Idle, Daraa, Quneitra y Latakia

Damasco, 20 abr (PL) Fuerzas conjuntas del ejército sirio establecieron hoy un cordón de seguridad alrededor de Daraa, a 103 kilómetros al sur de aquí, después de tomar el control de importantes localidades en el noreste de esa provincia.
Fuentes locales confirmaron que los uniformados lograron la víspera el control de los poblados de al-Sharqiya Miskiya, Miskiya al-Gharbiya, Rasm al-Khawabi, Ashnan y al-Dallasa, al noreste de la región.
También se conoció que se mantienen acordonadas las aldeas de al-Atash Mlaihat y Busr al-Harir.
El domingo fueron destruidos varios campamentos de bandas del Frente al-Nusra (brazo armado del grupo terrorista al-Qaeda en Siria), ubicados en las inmediaciones de los pueblos de Saida, Kafr al-Shams y Al-Sharqiya Ghariyah.
Las mismas fuentes confirmaron además que las fuerzas armadas continúan hoy sus operaciones ofensivas contra grupos extremistas que operan en las occidentales provincias de Quneitira y Latakia, y mantienen el cerco para recuperar la ciudad de Idleb, ocupada por bandas terroristas desde el pasado 28 de marzo.
En Idleb, a 320 kilómetros al noreste de esta capital, unidades castrenses libraron operativos especiales en zonas rurales de Yisser al-Shughour, destruyendo vehículos y pertrechos bélicos de los grupos antigubernamentales.
Cerca de los poblados de Tal Salmo y Abou al-Duhour, fueron abatidos integrantes del Frente al-Nousra y del Movimiento Islámico de los Libres de Shaam.
Se reportaron además duros golpes contra posiciones del Frente al-Nousra en los pueblos de Maydaliya y al-Nairab, y se confirmó la muerte del terrorista saudí Mohamad Abdulllah al-Tuaiyeri, uno de los jefes militares de la Brigada de Ahfad, afiliada al Movimiento Islámico de los Libres de Shaam.
En Alepo, a 350 kilómetros al noreste de aquí, las fuerzas armadas retomaron el control del poblado de Hyarah Kbireh y de las colinas que lo rodean, así como las localidades de Yeb Awad y las alturas de Shiek Mohamad, después de provocar considerables bajas entre los rebeldes.

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