«Hip Hip Tuk» la danza de un idioma que no existe

Por Huemanzin Rodríguez

“Ella me inspiró tanto por su música, que es muy bella y muy dinámica, como su forma de ver el mundo y su filosofía. Me inspiró hacer esta pieza, tomé nueve canciones. Cada una tiene una atmósfera onírica, basada un poco como en el estilo musical de la canción, de lo que habla y también por las diferentes facetas de su vida”.

(N22) Un poco el concepto es una mirada al mundo de los personajes que viven ahí, y viven una fiesta de cumpleaños todos los días. Esa es su cotidianidad. Es muy infantil, inocente, divertida y colorida, comentó la coreógrafa Diana León.

León es una joven que baila y dirige en la Compañía Vías, que lo mismo abreva de la danza clásica que de la contemporánea; su presentación formal ha sido con un programa doble en el Teatro de la Ciudad “Esperanza Iris”. La primera coreografía se llama Hip Hip Tuk, y está inspirada en la música del dúo checo DVA, quienes cantan en un idioma que no existe.

El origen de la Hip Hip Tuk se remonta a los años de estudiante, por petición de Rubria Sánchez, Diana León hace esta coreografía que un año después, retoma la idea para el Primer Concurso Interno de Coreografía de la Compañía Nacional de Danza.

La obra quedó para tres parejas y utiliza técnicas del ballet clásico. La siguiente obra se llama Lhasa, inspirada en la cantante Lhasa de Sela, de origen mexico-estadounidense que muriera muy joven a causa del cáncer. Diana León siente una conexión muy grande con la música de Lhasa y el resultado es esta coreografía integrada por nueve cuadros.

“Ella me inspiró tanto por su música, que es muy bella y muy dinámica, como su forma de ver el mundo y su filosofía. Me inspiró hacer esta pieza, tomé nueve canciones. Cada una tiene una atmósfera onírica, basada un poco como en el estilo musical de la canción, de lo que habla y también por las diferentes facetas de su vida”.

Diana León, quien ha sido becaria del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes como intérprete en 2007 y como joven creadora en 2011; comenzó su carrera como bailarina profesional en La Compañía Nacional de Danza, actualmente forma parte de Les Grands Ballets Canadians de Montreal.

“Definitivamente tengo muy presento todo lo que he vivido allá, pero sobretodo la inspiración de mis compañeros que son unos bailarines increíbles, solamente pensar en ellos me hace querer ser mejor”.

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