La primera visita del Papa Francisco a Ecuador, Bolivia y Paraguay dejó una profunda huella en América Latina, con sus ejemplos de humildad, generosidad y de crítica profunda al poder y sus exclusiones sociales.
El líder de la Iglesia católica aprovechó su primera gira pastoral por América Latina, entre el 5 y el 12 de julio, para refrendar su pensamiento a favor de los más pobres y sus críticas profundas a los poderes económicos y políticos.
Francisco dejó la huella de un líder carismático, humilde, cercano a la gente, que no le gusta gozar de las mieles del poder, ni paradas militares y mucho menos vehículos blindados para su desplazamiento.
Los mensajes del Papa estuvieron llenos de contenido político para llamar la atención de trabajar en serio contra la pobreza, la inequidad, la exclusión de todo tipo, la violencia.
“La inmensa riqueza de lo variado (…) nos aleja de la tentación de propuestas más cercanas a dictaduras, ideologías o sectarismos”, fue una de las reflexiones del Papa Francisco en su gira por América Latina.
Convocó a todos los miembros de la Iglesia católica y a los gobernantes a luchar por “la inclusión a todos los niveles” y por promover el diálogo sincero entre los gobernantes y la sociedad civil.
Fuente: Notisistema