(Agencias) Turquía.- Un ataque con un coche bomba contra un vehículo militar dejó dos soldados muertos y cuatro heridos en el sureste de Turquía, informaron las autoridades el domingo, un día después de que el gobierno turco bombardeara posiciones de insurgentes kurdos en el norte de Irak, según informó Associated Press.
Es probable que los bombardeos supongan el final del alto el fuego acordado en 2013, indicó un portavoz del grupo rebelde curdo Partido de los Trabajadores del Curdistán (PKK). Turquía lanzó una doble ofensiva con bombardeos contra extremistas del grupo Estado Islámico en Siria, cerca de la frontera turca, y una amplia redada policial en territorio turco contra supuestos milicianos curdos, el Estado Islámico y otras formaciones ilegalizadas. Cientos de personas fueron detenidas.
La agencia privada de noticias Dogan reportó que artillería turca estacionada cerca del pueblo fronterizo Semdinli bombardeó blancos del PKK cruzando la frontera en el norte de Irak durante tres horas el domingo en la mañana. Por el momento no hay conformación oficial del reporte.
El coche bomba estalló el sábado por la noche cuando un vehículo militar pasaba por una carretera en la localidad de Lice, indicó la oficina del gobernador de la provincia de Diyarbakir. Los soldados viajaban para intervenir contra kurdos que habían bloqueado una importante intersección en la zona, de mayoría curda. El ejército lanzó una operación para capturar a los agresores, señaló la oficina del gobernador.
Los asaltantes también atacaron una comisaría en Diyarbakir, dando pie a un tiroteo, señaló la agencia estatal Anadolu. Nadie resultó herido en ese incidente.
Cazas turcos bombardearon el sábado refugios y almacenes de los rebeldes kurdos a lo largo de la frontera en el norte de Irak, en el primer ataque de esta clase desde que comenzó el proceso de paz con los kurdos en 2012.
En los últimos días se han registrado tensiones con los curdos, después de un atentado suicida del grupo extremista EI en una localidad cerca de la frontera con Siria. Grupos kurdos han acusado al gobierno de no hacer suficiente por evitar las operaciones del grupo EI. El miércoles, el PKK se atribuyó la muerte de dos policías en Sanliurfa, una ciudad de mayoría curda.
La Casa Blanca dijo el sábado por la tarde que Turquía tiene derecho a defenderse contra ataques de los rebeldes curdos. El portavoz Alistair Baskey condenó con dureza los últimos ataques del PKK, considerado un grupo terrorista por Estados Unidos, y afirmó que el grupo armado debe renunciar al terrorismo y retomar las conversaciones con Ankara.
Sin embargo, Baskey también dijo que ambas partes deben evitar la violencia y buscar una reducción gradual de las hostilidades.