La Habana, 14 ago (PL) El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, paseó hoy, en mangas de camisa y sin corbata, por La Habana Vieja, un zona remozada y patrimonio de la humanidad que cuenta con casi cinco siglos de historia.
Bajo el inclemente sol del Trópico y flanqueado por guardaespaldas, periodistas y funcionarios -como el Encargado de Negocios, Jeffrey DeLaurentis, y la secretaria de Estado asistente para el Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson-, Kerry atrajo la atención de los viandantes -turistas y cubanos- en la Plaza de San Francisco de Asís.
El Historiador de la Ciudad, Eusebio Leal, hizo la veces de guía y acompañó a Kerry, el primer secretario de Estado que visita la isla caribeña en 70 años y, sobre todo, el primero en hacerlo tras el triunfo de la Revolución cubana en 1959.
Kerry saludó a los curiosos que se acercaron con teléfonos celulares y cámaras fotográficas para captar el momento.
Tras una conferencia de prensa junto al canciller cubano Bruno Rodríguez en el Hotel Nacional de Cuba (HNC), el alto funcionario norteño no dudó en ir a conocer una de las áreas más cosmopolitas de esta capital, donde confluyen cada día tradición y modernidad, cubanos de a pie y visitantes de medio mundo.
Durante el intercambio con los periodistas, Kerry aseguró que le encanta estar en La Habana y elogió el valor histórico de HNC, que asoma sobre una peña al estrecho de la Florida y que acogió en su momento a personalidades como los cantantes Nat King Cole y Frank Sinatra, el exprimer ministro británico Winston Churchill y el escritor norteamericano Ernest Hemingway.
Este viernes, Kerry arribó a La Habana para presidir la ceremonia de izamiento de la bandera en la reabierta -tras más de 54 años- embajada de Estados Unidos en Cuba.