Un cuarto de siglo protegiendo a la niñez

POR BLAS A. BUENDÍA blasalejo@gmail.com

· En ese lapso, la PGJDF ha atendido a más de once mil menores a quienes les ha brindado estancia transitoria

· En 2013 la población más baja de su historia, con 44 niñas y niños

· Un vibrante ejemplo: Rocío, una niña maltratada, hoy trabaja en el albergue

Con el propósito de proteger y garantizar el derecho infantil contra la violencia familiar y otros delitos de los que pudieran ser víctimas, la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal ha buscado, a lo largo de los 25 años de creación del Centro de Estancia Transitoria para Niños y Niñas, ofrecer certeza jurídica y cuidados a los menores mediante una atención integral y multidisciplinaria.
El objetivo primordial es privilegiar la integración o reinserción de los infantes a un núcleo familiar sano y estable que les permita continuar con un proyecto de vida libre de agresiones, con la esperanza de un mejor mañana.
Es el caso de Rocío, quien cambió el maltrato físico y psicológico por la libertad. Los golpes y las humillaciones que sufrió durante su infancia la convirtieron en parte de las estadísticas; sin embargo, paradójicamente, su llegada a los 11 años de edad al Centro de Estancia Transitoria cambió su vida.
Marcada con las huellas del dolor físico y moral, Rocío pasó su infancia con varios ingresos al albergue, pero hoy 20 años después forma parte de la plantilla laboral de esta institución.
María Elena Martínez Guerrero, directora del Centro de Estancia Transitoria, destacó que la apuesta desde el inicio de la administración del Procurador Rodolfo Ríos Garza, fue disminuir la población del Centro, “los infantes no deben vivir en las instituciones, el reto es darles otra calidad de vida, buscando mecanismos que permitan integrarlos a un núcleo familiar y no se les vaya la vida en una dependencia” puntualizó.
En mayo de 2009 cuando asumió el cargo, había aproximadamente 124 menores, en la actualidad cuenta con 75 en promedio diario, mientras que en enero de 2013 lograron tener la población más baja de su historia con 44.
Explicó que los niños abandonados en la vía pública, nombrados jurídicamente “expósitos”, son los únicos que la Procuraduría incluye en un procedimiento de adopción, una vez que el Ministerio Público ha agotado toda la investigación.
La servidora pública señaló que “se realiza una valoración muy cuidadosa y meticulosa de las familias que pretenden adoptar, mediante evaluaciones sociológicas, socioeconómicas y psicológicas, de las cuales dependerá la viabilidad o no de los candidatos a nuevos padres”.
Para este fin se forma un Consejo Técnico de Adopciones facultado para aprobar los casos propuestos, este es presidido por el C. Procurador General de Justicia del Distrito Federal e integrado por al menos 40 personas, entre los que se encuentran personal de la dependencia capitalina, el Presidente del Tribunal Superior de Justica capitalino, el Director General del DIF, la Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, entre otros invitados especiales.
Es importante destacar que la Procuraduría no da niños en adopción, lleva una elección o evaluación de familias, lleva a cabo la entrega de requisitos y solicitudes, mientras que el Tribunal Superior de Justicia es quien las otorga.
Desde que los solicitantes entregan la hoja de requisitos, se revisa la documentación, la aplicación de pruebas y emisión de resultados de viabilidad, en un tiempo aproximadamente de cuatro meses.
Por lo que hace al Tribunal con el Nuevo Sistema de Justicia en Materia Familiar se lleva una sola audiencia, en la que a más tardar en 15 días fijan la fecha de la misma de acuerdo con la agenda del Juzgado y ese día el impartidor de justicia dicta la sentencia.
Es importante mencionar que todos los modelos de familia pueden ser candidatos, la dependencia ha sido pionera en la República mexicana al aprobarse la primera adopción homo parental en 2010, cuando se aprobaron los matrimonios del mismo sexo en el Distrito Federal, con respeto absoluto a la no discriminación, a la inclusión, a los derechos humanos de éstas personas para formar familia.
Fundado el 23 de septiembre de 1990 con la nomenclatura de Albergue Temporal, el Centro de Estancia Transitoria tiene capacidad para albergar a 80 niños, donde el área de trabajo social hace una valoración del entorno para determinar si ha sido víctima de algún delito. “Este espacio es temporal en tanto que puedan determinar si se integran a una familia o si se tienen que mandar a una institución de larga estancia, se diseña un plan de trabajo médico, nutricional psicológico y educativo” agregó María Elena Martínez.
El personal labora con el firme propósito de salvaguardar y proteger los derechos e intereses de las y los niños víctimas de violencia familiar, retención, sustracción, omisión de cuidados, abuso sexual, violación, abandono de persona, entre otros.
El espacio cuenta con dormitorios, ropería, lavandería, cocina, comedor, ludoteca, así como una Dirección de Investigación Psicosocial, la cual brinda atención especializada en materia de psicología y de trabajo social y otra Operativa que proporciona la nutrición, servicios médicos, dentales y de atención pedagógica.
Durante este último cuarto de siglo que lleva en servicio dicho centro de atención a la niñez, han ingresado para cuidados y atención 11 mil 352 niñas y niños víctimas de delito. Al día de hoy, se encuentran bajo cuidados 72 infantes, esperando que en el futuro sean ciudadanos ejemplares, como Rocío, que con base a su esfuerzo personal, se preparó académicamente y hoy trabaja en la PGJDF.