Washington, 26 oct (PL) Más de 57 mil 440 personas viven hoy en albergues administrados por las autoridades de la ciudad estadounidense de Nueva York, porque carecen de vivienda, de ellos 40 por ciento son niños, una situación peor que en 2014.
Esta cantidad no incluye a un estimado de tres mil individuos que sobreviven en las aceras, estaciones del metro, parques y debajo de los puentes, ni los miles de mujeres y niños que deambulan tras escapar de la violencia doméstica, así como otras personas que se alojan en refugios especializados atendidos por otras instituciones.
Funcionarios locales a cargo de estos servicios así como organizaciones que los apoyan están preocupados de que en los próximos meses, con la llegada del invierno, la cantidad alcance cifras records, como sucedió en diciembre del año pasado en que el número de estos individuos sobrepasó los 59 mil.
Según el diario The New York Times el alcalde, Bill de Blasio, colocó este tema en el centro de su agenda, no solo por el aumento de quienes buscan refugio sino porque quienes se acogen a este beneficio permanecen más tiempo allí, lo que provoca erogaciones adicionales para mantenerlos.
Los adultos estuvieron en dichos centros 11 meses como promedio, unos 24 días más que en el año fiscal anterior, mientras las familias sin hijos pernoctaron en ellos cerca de 18 meses, con un aumento de 19 días en comparación con 2014.
Según el Times, las estadísticas refieren una imagen muy diferente a la que prometió De Blasio días antes de asumir su cargo en 2014, tras una campaña que abordó las frustraciones económicas de los neoyorquinos por sus bajos salarios y el aumento sostenido de los alquileres de las viviendas.
El político demócrata calificó entonces de inaceptable para el futuro de la ciudad de Nueva York el creciente aumento de las personas que viven en las calles y dijo que detendría esta tendencia que se manifestó durante la administración de su predecesor, Michael R. Bloomberg.
Aunque el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano de Estados Unidos señala que en todo el país hay más de 633 mil 780 de estos llamados «homeless», otras entidades especializadas aseguran que más de millón y medio de norteamericanos utilizan los servicios de albergues de emergencia porque no tienen donde vivir.