Washington, 28 oct (PL) El base Derrick Rose (Chicago Bulls) confesó hoy que jugó con un ojo cerrado todo el partido contra Cleveland Cavaliers, y aún así le endosó 18 puntos a los subcampeones de la NBA.
Rose aún se recupera de una operación para repararle una fractura facial que lo tiene con visión borrosa y doble, pero le bastó un ojo para desplegar su talento anotador, y quedarse con ganas de hacer alguna que otra bandeja.
«Me encuentro bien, podría haber anotado alguna canasta más, alguna bandeja. Poco a poco me estoy aclimatando, echaba mucho de menos poder jugar», comentó el otrora Jugador Más Valioso de la liga, azotado por las lesiones.
El pasado 29 de septiembre, su compañero Taj Gibson le rompió el orbital del ojo izquierdo en el primer día de entrenamiento de pretemporada, y en menos de 24 horas estaba en un quirófano.
Pronto volvió a las prácticas, con una máscara protectora, pero la hinchazón no cedía y se temió su ausencia en el partido inaugural de la temporada 2015-2016, o al menos que sus minutos en cancha fueran restringidos.
Sin embargo, Rose se acostumbró en las prácticas a jugar con el ojo izquierdo cerrado, y la variante le funcionó anoche de maravillas, como evidenció su manejo del balón y otras herramientas que lo hacen un arma temible.
«Estoy intentando reconstruir mi juego, mi forma de jugar, el manejo del balón, el dribbling, los movimientos, tiro hacia atrás, en suspensión, tiro desde fuera poco a poco me siento mejor e iré a más», comentó el prolífico anotador.
Además, aseguró que trabaja en sus dotes como líder, y minimizó las críticas en su contra, pues su interés en cancha no es demostrarle a nadie que está equivocado con él, si no ganar partidos con el objetivo final de coronarse.
Por lo pronto, Chicago comenzó bien su gesta, con victoria 96-95 sobre los Cavs de LeBron James, quien se llevó un inapelable tapón del español Pau Gasol a 3.6 segundos del final para sellar el triunfo de los Bulls.
NBA: Derrick Rose solo necesitó un ojo para vencer a los Cav
