Washington, 22 nov (PL) Hillary Clinton prometió reformar el sistema de financiación electoral si llega a la Casa Blanca en 2017, intención que hoy suscita cuestionamientos cuando su propia campaña sigue recibiendo millonarias sumas de individuos y corporaciones
Según una investigación del diario The Washington Post, tanto la aspirante presidencial demócrata, como su esposo, el exmandatario William Clinton (1993-2001) acapararon poderosos donantes a lo largo de 41 años, desde el estado de Arkansas que vio despegar sus carreras, hasta Washington y otros lugares del mundo.
Ambos han recaudado para sus respectivas campañas políticas y su fundación caritativa al menos tres mil millones de dólares, precisó el diario.
La investigación surge en momentos que los tres precandidatos presidenciales demócratas -Clinton, Bernie Sanders y Martin O´Malley- prometieron reformar el sistema de financiación electoral estadounidense.
Consultada por el diario, la campaña de Clinton intentó minimizar el asunto de las millonarias donaciones.
Hillary Clinton está comprometida con asegurar que tenemos una economía que funciona para todos los estadounidenses, y no sólo para aquellos en la cima. Por eso cree que la medida de nuestro éxito se debe definir por cuánto aumentan los ingresos para familias que trabajan duro, no sólo los principales ejecutivos y gerentes de cartera, dijo el equipo en una declaración escrita.
Desde que lanzó su propia carrera política en 2000, la exprimera dama recabó de sus simpatizantes 455 millones de dólares para financiar sus campañas y «Comités de Acción Política», los llamados «PACs» que operan de forma independiente, indicó la publicación.
Su campaña presidencial para 2016, que cuenta con 110 millones de dólares, también tiene el respaldo de tres «super PACs», grupos que tras un controvertido fallo del Tribunal Supremo en 2010, pueden aceptar donaciones sin límites de individuos y empresas, pero no pueden coordinarse con las campañas.
Los principales donantes de estos grupos, importantes figuras de Wall Street, Hollywood y Silicon Valley, también donan a su campaña, agregó la fuente.
Clinton figura como la favorita para obtener el blasón del Partido Demócrata de cara a las elecciones del 8 de noviembre de 2016, cuando pudiera convertirse en la primera presidenta de Estados Unidos.