Convencidos de que la labor fundamental del legislativo es adecuar continuamente la legislación para fortalecer nuestra democracia, los senadores del PRI nos declaramos listos para proponer y debatir las modificaciones en materia político-electoral y respetar el principio de equidad que debe regir en las próximas contiendas electorales, afirmó el senador Emilio Gamboa.
Ese, dijo, ha sido el principio y fin de las reformas políticas que se han llevado a cabo en la era contemporánea de nuestro país, por lo que es pertinente una revisión a fondo en áreas como la comunicación político-electoral, porque entre otros aspectos no podemos ignorar el cansancio que provocó en la ciudadanía la transmisión de millones de impactos electorales.
Debemos reconocer, además, que debido al pragmatismo propagandístico los candidatos han tenido que dejar de lado el mensaje de fondo, con lo cual se ha abandonado la posibilidad de que la sociedad cuente con elementos reales, para que pueda contrastar las plataformas e ideas de las distintas opciones políticas.
No se trata de replantear nuestro sistema político-electoral tras cada elección, ni de distraernos como legislativo de los temas que más importan a la gente, como la educación, la salud, la generación de empleos, vivienda y la seguridad pública, sino de dar el paso adicional necesario hacia la equidad en la competencia electoral que debe tener cualquier nación verdaderamente democrática.
Confiamos en que con la misma madurez y apertura con la que hemos avanzado en la solidificación de nuestra democracia, los grupos parlamentarios en el Senado de la República sabremos construir los consensos para afinar aquellos vacíos que quedaron pendientes en las últimas reformas.
Por todo ello, sin filias ni fobias, los priistas en el Senado estamos abiertos a debatir el modelo de comunicación política, porque la historia nos ha demostrado que las reformas electorales no son definitivas, pues los comicios aportan nuevos elementos que representan oportunidades para fortalecer la democracia y facilitar la transmisión de ideas y propuestas a la ciudadanía, que finalmente es quien elige a sus representantes.