Madrid, 31 ene (PL) El presidente del Gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, volverá a declinar presentarse a una investidura si continúa sin los apoyos necesarios, anticipó hoy el vicesecretario sectorial del Partido Popular (PP), Javier Maroto.
Si no hay modificaciones en los respaldos recibidos, no hay razones para que cambien las posiciones, razonó Maroto para justificar esa negativa del líder del PP, quien ya rechazó un primer ofrecimiento del rey Felipe VI para someterse a la confianza del parlamento.
Aunque resultó la agrupación con mayor número de votos en las elecciones generales del pasado 20 de diciembre, el PP obtuvo 123 escaños en el Congreso de los Diputados, lejos de los 176 establecidos como mayoría absoluta para gobernar.
El jefe del Ejecutivo saliente no cuenta hasta ahora con mayoría para ganar una votación en la Cámara baja, luego que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), segunda agrupación en el Congreso con 90 asientos, descartó avalar su reelección.
Por consiguiente, resultaría muy difícil que de aquí al próximo martes Rajoy consiga los sustentos necesarios para presentarse a una sesión de investidura.
Ese día Felipe VI concluirá su segunda ronda de consultas con los partidos políticos con representación parlamentaria para sondear su posición de cara a la conformación del nuevo Gobierno español.
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, con el que el Rey se reunirá el martes antes de recibir a Rajoy, exteriorizó la víspera su disposición a buscar consenso para la formación de un ejecutivo si el presidente del PP fracasa en su intento o vuelve a declinar ante el monarca.
Para los socialistas, si el jefe del Ejecutivo saliente vuelve a renunciar a su candidatura debería apartarse definitivamente de su partido y de la política y dejar paso para que Sánchez intente formar una mayoría.
Rajoy tiene 48 horas para decidir si va a pasar a la historia como el presidente más irresponsable de la democracia, alertó el portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, tras acusarlo de provocar un bloqueo institucional con el único objetivo de ganar tiempo.
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Rajoy rechaza investidura hasta lograr el apoyo suficiente
