Para mejorar la rendición de cuentas en la administración pública federal y homologar la forma de medir los temas de género, la Secretaría de la Función Pública y el Inmujeres, firmaron este miércoles un convenio de colaboración.
Durante la ceremonia de la firma, efectuada en el Museo Interactivo de Economía, el secretario de la Función Pública, Virgilio Andrade Martínez explicó que el convenio busca procurar la igualdad en todas las áreas directivas de la administración pública, pues hoy en día sólo 30 por ciento ocupan cargos directivos.
También se buscará asesoría de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, para establecer en la administración pública los protocolos de actuación frente al acoso laboral.
El convenio también buscará que la rendición de cuentas tenga perspectiva de género; que las estadísticas se construyan con el mismo criterio; y por último, que el gobierno trabaje con las organizaciones no gubernamentales para promover la equidad.
Al respecto, la directora del Instituto Nacional de las Mujeres, Lorena Cruz Sánchez, destacó que el convenio permitirá darle mejor seguimiento al programa Proigualdad y homologar los métodos de seguimiento al tema de género en toda la administración pública.
En su oportunidad, Ana Güezmes, titular de ONU-Mujeres en México, reconoció el liderazgo del país en el ámbito internacional, al promover que la igualdad se tome en cuenta en los Objetivos de Desarrollo Sustentable, criterio al que ya se han sumado más de 90 países.
Señaló que al tener la generación mejor preparada de su historia, a México ya le llegó el tiempo de la implementación de la igualdad, para agilizar el paso en un auténtico desarrollo con igualdad para el país.
También destacó que México es un ejemplo en la producción de estadísticas de género, si bien todavía tiene un déficit en los registros de la administración pública, que se pueden subsanar con este convenio.
Recordó que con la igualdad, los países alcanzan mejor desarrollo y las empresas crecen más, si bien a México le falta acelerar el paso en temas de implementación, programación, funcionamiento y rendición de cuentas.