Skopje, 9 mar (PL) Los países de los Balcanes cerraron casi por completo sus fronteras para impedir el paso a los indocumentados, lo que aumenta la presión migratoria sobre Grecia, según preocupaciones expresadas hoy por organizaciones humanitarias.
Macedonia, Croacia, Eslovenia y Serbia comunicaron en las últimas horas el aumento de los controles en las zonas limítrofes para bloquear la llamada ruta de los Balcanes, mientras sigue creciendo el número de foráneos atrapados en la nación helena.
La policía macedonia confirmó que cerrará completamente el paso, luego de varias semanas en que dejaron entrar solo a algunos grupos de sirios e iraquíes.
Un portavoz del ministerio del Interior aseveró que el estado «actuará acorde con las decisiones adoptadas por otros países en la ruta con los Balcanes», en referencia al cierre en otros territorios.
En Eslovenia, el primer ministro Miro Cerar sostuvo que «la ruta (de los Balcanes) para la inmigración clandestina ya no existe».
Ese país bloqueó el acceso e indicó que solo dejarán ingresar a los que pretenden pedir asilo en la nación, un número bastante reducido. A raíz del cierre de la ruta, Grecia está a punto de quedar colapsada y se encuentra al borde de una crisis humanitaria, dada la concentración de varios miles de migrantes en sus territorios.
El bloqueo en los Balcanes se suma al reciente acuerdo entre la Unión Europea y Turquía para frenar la llegada de indocumentados, consistente en devolver a la nación euroasiática a todos los foráneos que lleguen a Europa.
A cambio, el bloque regional entregará tres mil millones de euros a Ankara, y promete impulsar su proceso de adhesión a la comunidad.
Organismos internacionales como el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados expresaron cuestionamientos al trato, al considerar que podría implicar violaciones de los derechos humanos.
Países de los Balcanes cierran fronteras a migrantes
