Moscú, 30 mar (PL) El presidente Bashar al Assad aseguró hoy que la ocupación de Palmira en mayo de 2015 por la falange terrorista Estado Islámico (EI) es señal del fracaso de la coalición encabezada por Estados Unidos.
Consideró el mandatario en entrevista concedida al director de la agencia Rossiya Segodnya, Dmitri Kisseliov, que en Palmira quedó confirmada la falta de seriedad de Washington y sus aliados en la lucha antiterrorista, sobre todo contra el EI.
La liberación de Palmira se realizó con el apoyo de Rusia, es otro indicio de la poca seriedad que muestran, recalcó el estadista en otra crítica a Washington y los integrantes de la alianza formada por países occidentales y de la región que, sin autorización de Damasco ni de la ONU, bombardean al país árabe.
En referencia a que las Fuerzas Aeroespaciales del Kremlin lograron en cinco meses lo que no fueron capaces de hacer en cinco años el Pentágono y sus seguidores, al Assad calificó de fundamental el apoyo ruso en recientes victorias de las tropas sirias como en la liberación de la ciudad considerada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Durante la entrevista de la que hoy anticipan fragmentos la televisión federal y medios digitales, el estadista reitera que el pueblo y las Fuerzas Armadas tienen la voluntad de vencer con el respaldo de verdaderos amigos.
El Ejército sirio está decidido a liberar todas las regiones y nos apoyan nuestros amigos: el respaldo ruso fue fundamental y eficaz para conseguir estos logros, así como el apoyo de nuestros amigos en Irán, Hizbulá, otros grupos en Siria que combaten junto al Ejército, expresó.
Observó al Assad que tras varios días de la liberación de Palmira, algunos países que «supuestamente participan en la lucha antiterrorista» aún no dieron su evaluación.
Quiero decirlo claramente, los regímenes de Francia y Reino Unido no hicieron ningún comentario, sentenció el presidente constitucional de Siria.
En referencia a la fase actual de lucha antiterrorista en su país, el titular consideró necesaria la presencia de las bases militares de Rusia en su territorio porque resultan eficaces en el enfrentamiento al EI y los restantes grupos extremistas, «incluso si la situación de seguridad se estabiliza».
Indicó que el proceso de enfrentamiento antiterrorista no será rápido ni instantáneo, y subrayó que ese flagelo se propagó durante decenios en el Medio Oriente, por lo cual se necesitará mucho tiempo para derrotarlo.