Naciones Unidas, 6 may (PL) El representante especial de la ONU en Iraq, Jan Kubis, advirtió hoy en el Consejo de Seguridad que ese país sufre una profunda crisis política, marcada por una parálisis en la labor del Gobierno y del Parlamento.
Kubis señaló en una reunión para abordar la situación iraquí que el futuro resulta impredecible, «ante las diversas direcciones posibles de la crisis».
De acuerdo con el diplomático, las protestas populares ilustran la complejidad del escenario de la nación del Medio Oriente, sumida en la inestabilidad y el caos desde 2003, cuando Estados Unidos y sus aliados la invadieron y ocuparon, tras imponer un cambio de régimen.
El representante de la ONU consideró que las soluciones sobre la mesa no parecen satisfacer a todos los sectores, «por lo que parece probable la continuidad de las manifestaciones».
Para Kubis, urge que el Gobierno, los líderes políticos y la sociedad civil se enrolen en un diálogo constructivo, dirigido a superar las adversidades actuales y a proyectar el futuro del país.
Además de la crisis política, Iraq lidia con los desafíos de seguridad, sobre todo por el accionar de grupos terroristas como el Estado Islámico, que domina importantes territorios.