En una carta abierta dirigida al presidente de la república, Enrique Peña Nieto, a la Cámara de Senadores y Diputados, el Ayuntamiento de Tehuacán denuncia reprensión y hostigamiento por parte del gobernador del estado de Puebla, Rafael Moreno Valle.
Como una persona «poco respetuosa y misógina» se refieren al Ejecutivo del Estado, porque desde el principio de su gestión, la presidenta municipal ha sido víctima de éste. Al municipio de Tehuacán se le ha quitado apoyo financiero que proporcionalmente le debería tocar.
El escrito denuncia la presión para firmar «contratos ventajosos» como el programa «peso a peso» en el cual se duplican y hasta triplican los costos de las obras, mismas que son ejecutadas por empresas impuestas por Rafael Moreno Valle.
Pero la gota que derramó el vaso fue el retiro de la principal fuente de ingresos del municipio: las facultades del catastro municipal. Se argumenta la falta de un «convenio de colaboración catastral». Esto afecta el desarrollo social y la seguridad del municipio.
En la carta en donde afirman que están a la merced de un gobernador tirano, represor y dictador firma la presidenta municipal, Ernestina Fernández Méndez y su cuerpo de Regidores.