Por: Socorro Valdez Guerrero
Estimados y estimadas.
Queridos embelesados por algunos partidos políticos y candidatos, incluso enamorados de los independientes.
Pertenezco a una organización política y soy parte de la dirección de ese único partido en la Ciudad de México. Amo la camiseta y soy leal cuando mi fuerza de trabajo y mi intelecto están a ese servicio, pero también respeto las inclinaciones ideológicas de otros, incluso sus pasiones, aunque no coincida y por ello los conmino, respetuosamente a no invadir mi autonomía.
Siempre me verán promover el voto, pero el libre y el consciente, nunca el manipulado y menos el comprado. Creo en abatir la abstención y convencer de la importancia de ejercer el derecho a votar y ser votado. No hablaré mal de ninguna fuerza política ni de ningún candidato.
Siempre denostaré al politicastro -aquel de ruines intereses- al ambicioso y mezquino, y cuando estoy en el ejercicio pleno de mi profesión como reportera, denunciaré y exhibiré a quien daña al ciudadano, a la ciudad y al país.
Soy de las que cree en la libertad ideológica y política, por eso les pido, respetuosamente absténganse de incluirme en grupos de wats para definir o guiar mis decisiones políticas y partidaria. Sé quienes van al Constituyente, algunos hasta los conozco y he tratado. Sé qué número lo asignaron a los independientes, pero también sé por quién voy a votar.
Así que no pierdan su tiempo conmigo y avienten sus pilas, su esfuerzo y su gasto de internet por otro lado.