(Agencias) Diariamente los vecinos pasaban por donde se encuentra estacionada unacamioneta en la que pernoctaba un hombre a quien desde hace varios días no veían por las calles de la Colonia Esperanza, en la Delegación Venustiano Carranza, pero fue ayer que al percatarse de un olor nauseabundo decidieron echar un «ojo» en el interior de la troca y en la parte delantera encontraron el cuerpo putrefacto del indigente.
Era fuerte el olor y esto hizo que se alejaran a toda prisa de ahí, sobre todo lo importante era alejar a los niños de ahí porque el cuerpo de esa persona ya se encontraba hinchado, pues al parecer ya tenía más de 5 días de que había dejado de existir y sobre su cuerpo revoloteaban cerca de un centenar de moscas grandes y negras que se daban un «festín» sin ser molestadas.
Dos son las camionetas que se encontraban estacionadas con unos centímetros una de la otra, siendo la que portaba el número de placas MV-94-733 del Estado de Michoacán, en la que se encontraba el cuerpo del infortunado indigente que emprendió el viaje al más allá, así como había vivido los últimos años de su vida, sólo y cobijado por su miseria y calentado por el aguardiente.
El olor que emanaba del cuerpo de esa persona era fuerte y penetrante, pero pese a ello unos vecinos se fueron a dar una «vueltecita» cerca de la camioneta en lo que llegaban los representantes de la ley, y ya cuando los azules llegaron, les pidieron que se retiraran unos metros de distancia porque se iba a colocar la cinta para que ya no pasara nadie y dejaran sus huellas en la portezuela de la camioneta de color rojo.
La camioneta, que en la parte de atrás tenía estructuras de puestos semi fijos, lleva ya algún tiempo estacionada en la calle de La Viga, esquina con el Callejón San Antonio, y a pregunta expresa de los uniformados sobre quién es el propietario de la misma, les dieron algunos informes a los policías quienes a la vez se lo pasaron al agente del ministerio público en la Venustiano Carranza.
A la llegada de los peritos, éstos fueron advertidos sobre el fétido olor que emanaba del cuerpo de la víctima, por lo que sacaron sus overoles de color blanco y se colocaron unos cubrebocas, y de este modo pudieron acercarse y al hacerlo comenzaron por espantar a las moscas que se encontraban volando sobre el cuerpo del infortunado hombre, cuyos restos fueron llevados al anfiteatro delegacionalDiariamente los vecinos pasaban por donde se encuentra estacionada unacamioneta en la que pernoctaba un hombre a quien desde hace varios días no veían por las calles de la Colonia Esperanza, en la Delegación Venustiano Carranza, pero fue ayer que al percatarse de un olor nauseabundo decidieron echar un «ojo» en el interior de la troca y en la parte delantera encontraron el cuerpo putrefacto del indigente.
Era fuerte el olor y esto hizo que se alejaran a toda prisa de ahí, sobre todo lo importante era alejar a los niños de ahí porque el cuerpo de esa persona ya se encontraba hinchado, pues al parecer ya tenía más de 5 días de que había dejado de existir y sobre su cuerpo revoloteaban cerca de un centenar de moscas grandes y negras que se daban un «festín» sin ser molestadas.
Dos son las camionetas que se encontraban estacionadas con unos centímetros una de la otra, siendo la que portaba el número de placas MV-94-733 del Estado de Michoacán, en la que se encontraba el cuerpo del infortunado indigente que emprendió el viaje al más allá, así como había vivido los últimos años de su vida, sólo y cobijado por su miseria y calentado por el aguardiente.
El olor que emanaba del cuerpo de esa persona era fuerte y penetrante, pero pese a ello unos vecinos se fueron a dar una «vueltecita» cerca de la camioneta en lo que llegaban los representantes de la ley, y ya cuando los azules llegaron, les pidieron que se retiraran unos metros de distancia porque se iba a colocar la cinta para que ya no pasara nadie y dejaran sus huellas en la portezuela de la camioneta de color rojo.
La camioneta, que en la parte de atrás tenía estructuras de puestos semi fijos, lleva ya algún tiempo estacionada en la calle de La Viga, esquina con el Callejón San Antonio, y a pregunta expresa de los uniformados sobre quién es el propietario de la misma, les dieron algunos informes a los policías quienes a la vez se lo pasaron al agente del ministerio público en la Venustiano Carranza.
A la llegada de los peritos, éstos fueron advertidos sobre el fétido olor que emanaba del cuerpo de la víctima, por lo que sacaron sus overoles de color blanco y se colocaron unos cubrebocas, y de este modo pudieron acercarse y al hacerlo comenzaron por espantar a las moscas que se encontraban volando sobre el cuerpo del infortunado hombre, cuyos restos fueron llevados al anfiteatro delegacional.