Nueva Delhi, 14 jun (PL) La obesidad aumenta en casi todos los países mientras la desnutrición persiste en los lugares más pobres y la malnutrición se extiende por el mundo, informó hoy un comunicado del Global Nutrition Report.
Las conclusiones del informe provienen del análisis de 129 países, de los cuales 57 presentan altos niveles tanto de desnutrición -sobre todo en el retraso de crecimiento y anemia- como de obesidad y de sobrepeso en los adultos, explicó el investigador Lawrence Haddad.
Una de cada tres personas sufre malnutrición, fenómeno por el cual se producen casi la mitad de las muertes de los menores de cinco años. Estos procesos, junto a los regímenes alimentarios inadaptados, constituyen el primer riesgo de la sanidad pública, señaló.
Por otro lado, los menores de cinco años con sobrepeso igualan en número a los que presentan un peso demasiado bajo para su talla.
Según el informe, los sistemas de alimentación actuales no cubren las necesidades de 795 millones de personas que pasan hambre, ni los dos millones con malnutrición. Y menos el 1,9 millones de personas con sobrepeso y obesos.
Esto provoca que dichos sistemas sean reconocidos como la fuerza impulsora de la malnutrición en todas sus formas, afirmó Haddad.
Las comidas saludables son fundamentales para resolver el retraso del crecimiento y las deficiencias de vitaminas y minerales. Así como para la prevención de la obesidad y las enfermedades no transmisibles relacionadas con la dieta.
Este Informe Global es la única revisión anual independiente y completa del estado de nutrición del mundo, cuyo objetivo es proporcionar soluciones para el cambio en los sistemas mundiales de alimentación.
Este año el compromiso es mejorar la nutrición y acabar con las malas dietas en todas sus formas para el 2030.