Por Irma Gallo
(N22) “Esta técnica en la familia es una técnica de tradición. En la familia llevamos cuatro generaciones. Es el sustento de cuatro familias más. Enteramente nos dedicamos a producir esta artesanía”, dijo Martha Patricia García Aguilar, primer lugar en Categoría de Popotillo.
En su cuadragésima primera entrega, el monto del Gran Premio de Arte Popular fue de 3 millones 59 mil pesos que se dividieron en 131 premios.
“A nosotros nos enorgullece la técnica, el trabajo, que se nos reconozca como artesanos que somos y sí, si nos cambia mucho la vida”.
“Por supuesto que es muy importante que haya 131 mexicanos que recibieron una muy buena cantidad de dinero que les ayudará a reinvertir, a crecer el taller o a darse un gustito”, agregó Liliana Romero, directora de FONART.
“Aproximadamente el 50% hacemos cerámica. Ese es el problema de la artesanía: el poder vender y luego vender a precios justos. En la región donde vivimos tenemos problemas de inseguridad y ha bajado mucho el turismo. Antes sí podíamos vender mejor y más, ahora no”, añadió Salvador Baca Carbajal, segundo lugar en categoría Barro bruñido.
Para este artesano de Nuevo Casas Grandes, Chihuahua, la venta principal proviene de norteamericanos que le compran por mayoreo.
El premio más importante, llamado Galardón Presidencial y reconocido con un monto de 125 mil pesos fue para Rosario Nuñez Flores, de Tenancingo, Estado de México, por un rebozo con punta de granada.