La Habana, (PL) Poblaciones de América Central, África, India y otras zonas tropicales estarán obligadas a emigrar si el calentamiento global aumenta dos grados centígrados antes de fin de siglo, vaticinaron científicos estadounidenses.
El estudio publicado en Scientific Reports, indica que personas, animales y hasta plantas tendrán que recorrer cientos de kilómetros en una inmigración forzosa.
Científicos de las universidades de California y Columbia demostraron cómo la dinámica del clima en los trópicos puede amplificar dramáticamente las consecuencias del cambio medioambiental mientras se experimentan sobre el suelo.
Aún no existen predicciones específicas sobre los patrones de migración de las especies individuales, pero el propósito geofísico es ese, mientras los trópicos se calientan hay que escapar para esperar hasta que estas localidades se refresquen, señalaron los investigadores.
Los expertos explican que debido a la uniformidad cálida de los trópicos, cuando la temperatura sube sólo una pequeña fracción, las poblaciones tienen que moverse mucho para estar a salvo. Esto provocará «una evacuación casi total de la banda ecuatorial que podría afectar a los ecosistemas, así como el bienestar humano».
Dicha la uniformidad de la temperatura tropical es un hecho básico de la estructura de la temperatura de la Tierra, y lo se elevará con los cambios climáticos.
Según los cálculos, algunas poblaciones oceánicas y continentales tendrán que moverse hasta mil 500 kilómetros o más para permanecer dentro de su «presupuesto de temperatura».
Ante esta situación, se pronostica que los bordes más fríos de los trópicos se atestaran, pues es ahí donde las poblaciones teóricamente podrían subir en un 300 por ciento o más.Este aumento en las densidades, traerá consigo la propagación de las enfermedades y los conflictos por los recursos.
Otro problema real surgirá si las poblaciones no puedan moverse a causa de fronteras políticas o el avance lento de alguna especie, recalcaron.
Naturaleza migrante
El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), publicó un comunicado en el cual alerta sobre las consecuencias del calentamiento global en los ecosistemas globales.
Según el IPCC, para el 2100, los ecosistemas se verán expuestos a niveles de dióxido de carbono (CO2) atmosférico sustancialmente más altos que en los pasados 650 mil años, y la temperaturas ascenderán más que las de los últimos 740 mil años.
Esto alterará la estructura, reducirá la biodiversidad y perturbará el funcionamiento de la mayoría de los ecosistemas.
Por un lado, la distribución de las especies, determinada por la temperatura, la lluvia y las barreras geográficas, se transformará de forma radical.
En lugares donde el cambio climático afecte la temperatura y la precipitación; y en cada estación las isotermas de los hemisferio norte y sur se muevan más hacia ellos; las poblaciones de plantas y animales que buscan condiciones óptimas harán lo mismo. Esto será posible, suponiendo que haya espacio para mudarse y la especie está en capacidad de hacerlo.
Aquellos con aptitudes para el traslado pueden emigrar a medida que sus condiciones ecológicas varían, pero las plantas y animales sésiles no, señala el informe.
En el caso de las especies arbóreas con tiempos de maduración muy lentos y estrechos rangos de temperatura, probablemente no sobrevivan si la velocidad del calentamiento de la atmósfera es más rápido que su ciclo de desarrollo.
Las plántulas en el borde correcto de la dirección de cambio probablemente crecerán, pero no alcanzarán la edad reproductiva antes de que el incremento en la temperatura provoque la pérdida de las condiciones necesarias.
Asimismo, la vegetación alrededor de las montañas tenderá a moverse hacia arriba. Como consecuencia, esto llevará a la extinción de especies endémicas adaptadas a las condiciones de cumbres aisladas que ya no tendrán a donde ir.
El informe declara que tanto las barreras naturales como las construidas por el hombre, representan también un problema para el movimiento de las especies.
La mayoría de los animales terrestres que viven en las islas no podrán emigrar -excepto pájaros, murciélagos e insectos voladores en busca de nuevos hábitats.
El calentamiento global y las invasiones biológicas son los dos agentes principales del cambio climático que afecta el planeta. Dichos fenómenos, inducidos por la acción del ser humano, a menudo se dan de manera sinérgica y contribuyen a la reducción de la diversidad biológica.
Enfrentar estos factores y los efectos combinados de sus impactos, significa un gran desafío para la comunidad mundial, concluye el comunicado.