Lima, 20 jun (PL) El delantero peruano Raúl Ruidíaz reconoció finalmente hoy una verdad monumental, que su gol que eliminó a Brasil de la Copa América Centenario lo anotó con la mano.
«Esa pelota tenía que entrar como sea», dijo a modo de explicación y agregó que «más que picardía, era la única opción que tenía para anotar» y eliminar al poderoso y favorito Brasil.
«Era el último recurso, algo de momento. Los comentarios que me puedan decir, no me importan», sentencio el menudo atacante que hasta hoy insistía en que el mentado gol lo anotó con el muslo.
El gol fue validado porque, según las normas del fútbol, el árbitro no vio el toque del balón con la mano y tampoco lo advirtieron los demás jueces. Y por aquello de que el margen de error es parte de la emoción del fútbol.