Tras el enfrentamiento entre policías federales y maestros disidentes en Oaxaca, el jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, reiteró que la Ciudad de México no quiere un clima de violencia.
Ante la posibilidad de que los hechos registrados en Nochixtlán, deriven en un reforzamiento del campamento que los maestros de la CNTE mantienen en la Plaza de La Ciudadela, advirtió que no cederán a dar otros espacios para fortalecer su movimiento.
Fuente: Notisistema