PRD tilda al gobierno de ‘torpe y autoritario’ ante el conflicto magisterial

México, 22 jun (PL) El gobierno mexicano se ha comportado de manera torpe y autoritaria en la implementación de la reforma educativa, afirmó hoy la diputada federal Maricela Contreras.
En declaraciones exclusivas a Prensa Latina, la legisladora por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) condenó el uso de la fuerza por parte de policías federales, estatales y municipales contra maestros y representantes de movimientos sociales en Oaxaca, opuestos a la reforma.
Contreras lamentó la muerte «de seis u ocho personas» el domingo en Nochixtlán, Oaxaca, donde tras horas de enfrentamientos decenas de personas resultaron heridas y detenidas durante protestas convocadas por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y apoyadas por otros sectores.
No podemos echar adelante una reforma cuando hay sangre y fuego; lo cual hace grave y reprobable la conducta del gobierno federal, afirmó.
Dijo que se precisan estrategias diferentes porque todos los estados no son iguales.
Oaxaca, argumentó, tiene más de 350 municipios, muchos de ellos de población indígena donde se rigen por usos y costumbres.
En esas comunidades la carrera magisterial es un mecanismo de ascenso social, pero hoy es preterida e incluso criminalizada, subrayó.
La reforma se quiere meter por la fuerza, con un Secretario de Educación Pública (Aurelio Nuño) autoritario quien, lejos de abrir los caminos al diálogo procuró mecanismos coercitivos, acotó.
Dijo que el PRD insiste en que se tienen que oír todas las voces, tanto del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) como en la CNTE.
No se escuchó a las partes para hacer ajustes y ahora tenemos que encontrar mecanismos para parar la crisis, la cual hoy significa muertos, heridos y desaparecidos, expresó.
La diputada llamó a hacer un alto y facilitar espacios para encontrar soluciones a un conflicto que consideró de «alcance nacional».
Exigió además la renuncia de Nuño, a quien calificó de insensible ante las demandas de sectores magisteriales.
«Queremos mejorar la educación, pero ello no se consigue criminalizando a los maestros», concluyó.