Por Karen Rivera
(N22) “Los Geoparques son zonas geográficas que tienen un contenido de elementos geológicos sobresalientes que son reconocidos o pueden ser reconocidos internacionalmente por su interés científico y paisajístico. Existe un modelo de desarrollo local de la economía que sea sustentable y que parte de un modelo de gestión participativa, donde intervengan los pobladores, el gobierno y también el sector académico”, comentó Carlos Canet, investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM.
Existen en el mundo aproximadamente 130 Geoparques, cuatro de ellos se encuentran en el continente americano: dos en Canadá, uno en Uruguay y uno en Brasil, de ser aprobado por la Unesco, el estado de Hidalgo, en México albergaría el quinto Geoparque de América.
“Se trata de una región muy emblemática dentro del estado de Hidalgo conocida como la comarcan minera, donde realmente existen rasgos de la geología que son sobresalientes, por ejemplo, el sistema de betas de Pachuca en Real del Monte, es un yacimiento mineral, de clase mundial, actualmente no se explota pero durante 400 años, hizo que fuera el distrito minero generador de plata más importante del mundo”.
Un Geoparque está articulado por una serie de geositios, es decir, lugares de interés que pueden ser mostrados a la población no sólo de manera estética sino por su rico interés científico y divulgativo. El Geoparque de Hidalgo cuenta con 31 zonas que se pueden visitar en función del legado minero, arqueológico, cultural, o paisajística.
“Lo importa es demostrar que este geoparque tiene una utilidad para el público en general porque las personas llegan a esos lugares y regresan a sus casas con un aprendizaje”.
El Geoparque Hidalgo, se encuentra en espera de la aprobación por parte de la Unesco para hacer oficial su título.