Washington, 8 jul (PL) Estados Unidos gastó en los últimos 30 años más en correccionales y prisiones que lo usado en educación básica, secundaria y superior, reveló hoy estudio gubernamental.
Citado por el diario californiano La Opinión, el texto muestra que el gasto de fondos locales y estatales en cárceles supera con mucho lo dedicado a la educación y el aumento en ambos rubros durante las últimas décadas fue tan desbalanceado, que en algunos sitios del país se invierte dos, tres y hasta cinco veces más en correccionales que en escuelas.
Esa conclusión proviene de los análisis del propio gobierno federal divulgado en un informe del secretario de educación estadounidense, John B. King.
Tal reporte es el primero que hemos hecho de ese tipo, comparando gasto en educación y cárceles y tomando en cuenta el crecimiento en la población en ambos rubros, señaló King durante una teleconferencia.
Lo que vemos es que durante los últimos 30 años los gobiernos locales aceleraron muchísimo más su inversión en prisiones y sistemas correccionales que en educación, subrayó.
En esa dirección destacan siete estados en particular en los que se trata de un incremento cinco veces mayor en cárceles que en escuelas: Idaho, Michigan, Montana, North Dakota, South Carolina, South Dakota y West Virginia.
El peor rubro es el de la educación superior o universitaria, donde el gasto desde 1990 se estancó o bajó, mientras aumentó en 89 por ciento el dinero invertido en recintos penitenciarios.
El documento aireado por King revela, además, que en tres décadas, el gasto en educación desde pre escolar hasta 12 grado se duplicó (258 mil a 534 mil millones) mientras que para cárceles se cuatriplicó (17 a 71 mil millones de dólares).
Según Valerie Jarret, asesora ejecutiva del presidente Barack Obama, los estados y localidades tenían «prioridades equivocadas».
Esto no aumenta la seguridad pública, subrayó. «Estados Unidos tiene el cinco por ciento de la población mundial y el 25 por ciento del número de presos, 2.2 millones de personas están en la cárcel en nuestro país, uno de cada tres estadounidenses tiene un récord penal».
Mientras King destacó que hay una clara relación entre el gasto en educación y la delincuencia. «Sabemos, dijo, porque muchas investigaciones lo han revelado, que hay una relación causa y efecto, las dos terceras partes de los presos son personas que abandonaron la secundaria».