Los mexicanos ya están en un punto en donde ya ni saben a qué partido darle su voto de fe para salir adelante. Analistas políticos consideran que, de acuerdo al desempeño de la administración federal actual, se encuentran las condiciones para que el partido de la izquierda regrese y lo mismo sucede en muchos estados de la república en donde el PRI, está posicionado.
Pero la realidad de las cosas es que es demasiado pronto para adelantarse a hacer pronósticos o predicciones sobre quién va a quedar en el poder y por otra parte no se puede negar que la situación económica para todos los mexicanos no ha sido fácil en estos últimos años en el cual estamos estancados en competitividad, marginación de la pobreza, cobertura educativa, productividad, falta de trabajo, etc.; en todos los rubros nos encontramos paralizado y en otros en detrimento.
La necesidad de poder tener ingresos ha sido el motor de ser más creativos para poder incrementar las ganancias; el único instrumento para poder adquirir liquidez en los negocios es hacer sentir que la otra parte va a tener un beneficio, en pocas palabras; la necesidad de incentivar a los demás.
La falta de liquidez y la cartera vencida es un problema muy común no solamente para las empresas sino también para los gobiernos, ya que por solo mencionar cada vez hay más contribuyentes que desaparecen del Secretaría de Hacienda, o simplemente personas morales que se dejan abandonadas con un adeudo de pago de impuestos en donde solamente se encuentra el cascarón del negocio.
En otra escala, pero no deja de ser un termómetro que sirve como indicador en donde la situación económica del país no anda bien son en aquellas cabeceras municipales del país en donde los contribuyentes registrados en el catastro de propiedades han dejado de pagar el impuesto conocido como el pago del predial, en donde muchos de estos terrenos simplemente son abandonados cuando en éstos no existe una edificación y en los casos contrarios en donde existe una construcción simplemente han dejado de pagar el gravamen de los inmuebles tanto de vivienda como aquellos destinados al comercio e industria.
La cosa no es fácil y ante tal dificultad de poder hacer el cobro porque hasta para eso la carencia de personal para poder emitir y ejecutar la falta de contribución por parte de las autoridades lo hace más complicado y hasta cierto punto imposible muchos alcaldes y gobernadores, pero sobre todo los primeros se les han ocurrido en años recientes buscar mecanismos de estímulos fiscales como los famosos descuentos que hacen cada año en los meses de enero, febrero y marzo.
No obstante dichos descuentos no han sido suficiente para convencer a los contribuyentes para hacer el pago que muchos alcaldes echaron a volar la creatividad para incentivar a la población para el pago predial, siendo éste una de las recaudaciones más importantes de cada municipio, para poder tener dinero, y realizar obras públicas muy independientemente del ingreso autorizado por el gobierno del estado y federal reconocido éste último por hacer llegar sus recursos desfasado por más del año si bien les va o nunca llegan a su destino final. Al menos esa es la queja de la mayoría de los ediles del país.
La rifa de casas y autos han sido la única causa motivacional para hacer posible que los ciudadanos cumplan con el pago puntual del predial y tanto ha sido su éxito que continúan repitiéndolo año tras año. Pero lo que ha sido en este último año dichos estímulos fiscales no han tenido eco en la sociedad ya que cada vez es más golpeado los bolsillos de los mexicanos, ante el bajo crecimiento del país.